⤷ ⸻ ✭🟪 ~ ┊En dónde el amor abunda desde la niñez y ambos niños que ahora son adultos prometen mantener intacto aquello que ejerció gracias a la conexión. « Solo te sería infiel con la luna, pero ella ni siquiera tiene tu estilo ♫ »
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narrador !
1 de enero, 2024.
Buenos Aires, Argentina.
— Me niego a regresar a la universidad. — se quejó la rubia volviendo a enrollarse entre sus sabanas.
Iván la miro encogiéndose de hombros y golpeando su frente levemente recordando que tenía una novia mas dramática después de haberse visto true beauty por decima vez.
— Amor, faltan dos semanas de que te quejas? — ironizó rodeando sus ojos colocándolos en blanco.
— Es cierto — susurró sentándose en la cama dándole la razón a su novio.— pero no puedo vivir sabiendo que faltan dos semanas. — se volvió a tirar en la cama
El azabache río por lo bajo y siguió jugando Minecraft. A veces la vida de ambos ya viviendo juntos era un poco dramática por parte de Lucía y la calma por parte de Iván, los caprichos que él había generado en ella eran sanos, pero ahora no podían estar ni un minuto separados.
— Amor, amor, amor, amor. — llamó repetidas veces a su novio intentando captar su atención.
Iván pauso el juego y dio una media vuelta quedando frente a frente con su novia. Está tenía una sonrisa inocente, esa sonrisa que solamente hacía cuando tenia hambre y él lo sabía.
— Tranquila, ya pedí comida hace media hora, porque sé que tu imperatividad es por hambre. — respondió volteándose nuevamente.
Lucía se levantó y comenzó a dar pequeños brincos en la cama de la felicidad. Iván la conocía perfectamente, y ella a él.
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— Amor, has visto mi remera? — salió Iván del cuarto hacia la sala viendo a su novia.
— Está colgada en el baño, la dejaste ahí. — respondió sin despegar la mirada de su libro.
— Gracias amor. — sonrió, se veía linda leyendo.
Después de cinco minutos volvió a salir el morocho esta vez con la remera puesta. Se había salido de bañar luego de estar jugando toda la tarde, para poder así ver películas con su novia, ella estaba entretenida leyendo que no notó mucho su presencia.
Fue a la cocina y reviso entre los cajones de arriba que snacks habían para preparar algunas botanas para morfar viendo las películas. Agarró un paquete de galletitas de chocolate, un dorito grande, galletitas saladas que iba a acompañarlas con salsa.
Comenzó a sacar embaces para vaciar todo, prosiguió a destapar todo y a dejarlo todo en su lugar para colocar todo en una bandeja grande. Sacó una jarra de jugo de naranja para servirlo en sus vasos favoritos para ponerlas en la bandeja al igual que lo demás.
Agarró la bandeja entre sus manos y con sumo cuidado camino hacia la sala dejando todo en la pequeña mesa del frente.
— Amoorrrrr. — dijo haciendo puchero al ver todo.
Él no contestó, solo dejó un pequeño beso en su frente y se sentó al lado de ella.
Pasó su brazo por encima de ella atrayéndola hacia él abrazándola, Lucía se acurruco en su pecho por un buen rato antes de comenzar a ver la película.
Iván definitivamente sería el hombre con que ella se casaría.
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