𝐓𝐞𝐬𝐭 𝐦𝐞

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Resumen: El grupo de amigos pasa el rato juntos y surgen problemas... Más tarde, Jimin y Jungkook se encuentran solos para su próxima lección.

"¿Por qué no puedo?" Murmuró Jimin, dejando escapar un suspiro de frustración mientras apagaba la música para comenzar de nuevo.

El chico más pequeño había practicado durante horas, tratando de idear una nueva coreografía, y perfeccionarla realmente no fue fácil. Sudaba mucho, le corrían gotas visibles por la cara, tenía el pelo húmedo.

Verás, Jimin era bailarín. Le encantaba bailar y le apasionaba. Incluso se había graduado de la escuela de arte, con énfasis en danza – danza contemporánea para ser exactos. Amaba todo tipo de bailes diferentes, cada uno de los cuales tenía algo hermoso. Sin embargo, quería que fuera algo más que un afición, quería y soñaba que fuera su profesión y algo de lo que pudiera vivir.

En la actualidad, el rubio trabajaba en una biblioteca y pagaba sus cuentas con el dinero que ganaba allí, así como con la herencia que le dejó su abuela. Ella había sido la única buena persona en la primera infancia de Jimin, un ángel, de hecho. Honestamente, ella había sido la única persona que brilló una luz en su oscura infancia, haciendo que la vida fuera soportable todos los días. Ella lo había apoyado mucho en su sueño, incluso en ese entonces, y se notaba que Jimin también estaba haciendo eso por ella, siempre teniéndolo en mente cuando bailaba. Puedes imaginar lo desconsolado que estaba Jimin cuando ella murió, dejándolo solo, teniendo que pelear sus batallas sin ella.

La mujer le había dado a Jimin todo lo que tenía: dinero, muebles e incluso su casa. Sin embargo, Jimin no se quedó allí mucho tiempo, dejó Busan y se mudó a Seúl porque él...

"Jiminie, no te esfuerces demasiado", una voz interrumpió sus pensamientos, sorprendiendo al chico más pequeño cuando se dio la vuelta.

"Tae", sonrió, tomando su botella de agua y quitándose el cabello de la cara mientras saludaba a su mejor amigo.

"Te traje algo de comida", sonrió el chico más alto mientras sostenía una bolsa de plástico para mostrársela.

"Eres un ángel", comentó Jimin, acercándose a su amigo y sentándose en el suelo, Tae se unió a él y se sentó con las piernas cruzadas. "¿Cómo supiste que estaría aquí?"

"Porque todavía estás aquí", se rió el chico de cabello oscuro mientras sacaba dos loncheras, solo entregándole una a Jimin, quien de inmediato comenzó a tener la boca agua, su estómago gruñía. No había comido nada hoy, se había olvidado de esta mañana y estaba demasiado ocupado todo el día.

"Gracias, eres el mejor", le dijo el chico más pequeño a su amigo mientras abría su lonchera. Taehyung era realmente un ángel, siempre cuidaba de Jimin y sabía lo que necesitaba sin que él tuviera que decir nada, una verdadera alma gemela.

"Lo sé", dijo Taehyung con una sonrisa, luego agarró sus palillos y agarró un trozo de carne con ellos, "pero puedes hacerme un favor a cambio".

Jimin acababa de poner mucho arroz en su boca, felizmente masticando su deliciosa comida, pero cuando esas palabras salieron de la boca de Taehyung, detuvo su movimiento, mirando a su mejor amigo con sospecha.

"Está bien... Pero primero dime qué es"

"Ven con nosotros mañana por la noche. Hyung quiere reunirse con nosotros en el restaurante de Jaebum mañana. No nos hemos visto desde su fiesta. Dijo que nos extrañaba y que debería arrastrarte a nuestra cita. Vamos, seguro que tú también lo echas de menos. ¡Probablemente ya tiene muchas historias geniales que contarnos sobre sus primeros días trabajando en una compañía de entretenimiento!"

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