Illuminate

𝐏𝐢𝐞𝐜𝐞 𝐛𝐲 𝐩𝐢𝐞𝐜𝐞

Resumen: Jimin está tratando de reparar su corazón... ¿Será capaz de perdonar a sus amigos?

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"Minnie, por favor, lo siento mucho", gritó Tae mientras tocaba la puerta principal de nuevo, su voz sonaba tan vulnerable y quebrada.

Jimin escondió su rostro en su regazo, ahogando sus propias lágrimas mientras se sentaba de espaldas a la puerta. Jimin no estaba seguro, pero imaginó que Tae también estaba sentado de espaldas a la puerta, viendo cómo había estado llamando, disculpándose y llorando en esa puerta durante una hora.

"Por favor, abre la puerta, Minnie", suplicó Tae, luego siguió llorando cuando volvió a llamar, "Lo siento mucho. Cometí un error, lo sé"

El chico más pequeño cerró los ojos, envolviendo sus brazos alrededor de sus piernas mientras más lágrimas corrían por su rostro.

Habían pasado algunas horas desde este incidente en casa de Yoongi. Jimin se escapó, los dejó a todos allí y corrió a casa. Jimin todavía podía escuchar la voz de Jungkook llamándolo, rogándole que se quedara.

Ninguno de ellos lo había seguido, finalmente respetando su deseo de estar solo. Jimin necesitaba tiempo para sí mismo, tiempo para pensar en todo esto. Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de que Taehyung apareciera frente a la puerta de su casa, llamando y tocando sin que Jimin le respondiera. Obviamente, Taehyung ahora había recuperado la sobriedad y se dio cuenta de lo que había hecho y cuáles fueron las repercusiones.

"Minnie, por favor, lo siento", rogó el rubio una vez más, con la voz quebrada, "No sé qué puedo hacer para arreglar esto. Sé que hice mal. No debí haberle dicho. Soy... soy una persona horrible, lo sé. No quiero justificar mis acciones, pero es que a veces no puedo dejar de hablar, lo sabes. Nunca quise hacerte daño. Sabía que tú también confiabas en él, ¿y recuerdas cuando hablamos de que querías contarle sobre tu papá? Yo... sólo pensé que podía ayudarte. Me equivoqué. Se que me equivoque. No me corresponde a mí decírselo a nadie. Lo siento, Minnie", la voz de Taehyung bajó de volumen con cada palabra, cada sílaba sonaba más vulnerable. Cada palabra fue sincera, llena de disculpas.

Jimin había conocido a Taehyung durante tanto tiempo que estaba convencido de que eran almas gemelas. Taehyung no podía actuar así, no podía fingir frente a Jimin, el chico más pequeño vio todo esto. Sin embargo, después de todo eso... Jimin no estaba seguro de que el Tae que creía conocer fuera real en este momento. ¿Era realmente su mejor amigo? ¿El chico con el que había compartido más de la mitad de su vida? ¿El chico en el que pensó que podía confiar con todo su corazón?

Francamente, el chico de cabello naranja no sabía qué creer en ese momento.

Era obvio que no podía desperdiciar los trece años que había pasado conociendo a Taehyung solo por ese error, ¿verdad? Después de todo, ¿no era Taehyung la misma persona que lo amaba?

Aun así, si realmente lo amaba, ¿cómo podría romper la confianza de Jimin de esa manera?

Jimin inhaló, luego los sollozos abandonaron sus labios mientras se limpiaba las lágrimas, pero más corrían por su rostro.

Fue una batalla agotadora. De hecho, su corazón daba vueltas, una parte de él no quería volver a ver a los demás, otra parte le aseguraba que iban a salir adelante de una forma u otra, viendo la luz al final del túnel y sabiendo que las piezas de su corazón iban a ser recompuestas para poder perdonar a sus amigos en algún momento.

Sin embargo, a estas alturas, la parte dañada y traicionada se había hecho cargo, la parte que nunca quería volver a ver a ninguno de ellos.

Francamente, Jimin se sintió humillado, estaba avergonzado de haber sido una especie de proyecto, un experimento para sus amigos; desafortunadamente, así era exactamente como se sentía Jimin en este momento. El chico más pequeño solo quería alejarse lo más posible de todo.