14.- la cámara secreta.

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Para Wen Jun, esta noche estaba destinada a ser inquieta.

El aliento de Ji Lan Zhi a su lado se volvía cada vez más tranquilo y constante. 

Estaban muy cerca el uno del otro, cara a cara, y Wen Jun incluso podía ver claramente las distintas pestañas de su hermano mayor.

La forma humana de Ji Lan Zhi tenía mucho frío. Al no tener una fuente de calor para dormir, se envolvía apretadamente en las mantas, echo una bola, provocaba un poco de lastima. 

Ahora, de repente, Wen Jun, como una gran estufa, estaba a su lado por lo que durante el sueño, Ji Lan Zhi se acercó lentamente a la fuente de calor y, en poco tiempo, se había apretado contra su pecho.

En la tranquila y silenciosa noche, el pico en donde habitaban estaba en completo silencio.

Solo se escuchaba ocasionalmente el susurro del viento frío.

Comparado con la temperatura gélida del exterior, la habitación estaba mucho más cálida. Wen Jun miraba a su hermano mayor, que dormía plácidamente en sus brazos, e incluso sentía que todo su cuerpo estaba un poco caliente.

Ambos llevaban solo finas prendas interiores. Ji Lan Zhi, durmiendo tan cerca de él, permitía que Wen Jun sintiera la temperatura de la piel de su hermano mayor a través de la tela.

"Hermano mayor", susurró suavemente.

Ji Lan Zhi, profundamente dormido, no respondió a su llamado.

Aprovechando la oscuridad como cobertura, Wen Jun se acercó un poco más a la persona en sus brazos.

Con el aroma medicinal impregnando su nariz, inhaló suavemente y emitió un suspiro satisfecho en la silenciosa noche.

"Hermano mayor..."

El joven crecía cada vez más alto. Las manos que antes solo podían ser sujetadas por su hermano mayor ahora tenían articulaciones distintas y eran largas y fuertes.

Esas manos estaban pegadas a la cintura delgada y flexible de su hermano mayor. Al acercarse suavemente, la nariz puntiaguda de Ji Lan Zhi rozó el clavícula de Wen Jun que quedaba expuesta.

Era un poco emocionante, pero sobre todo,  Wen Jun sentía un temblor en lo más profundo de su corazón.

En la oscuridad, parecía que algún tipo de pensamiento extraño estaba creciendo lentamente.

Wen Jun cerró lentamente los ojos con el latido ensordecedor de su corazón.

...

En el primer día sin clases, también fue la primera vez que Wen Jun no meditó hasta el amanecer.

Sin embargo, ya estaba acostumbrado a levantarse temprano. Cuando se despertó, el cielo fuera de la ventana apenas estaba empezando a aclararse. Al mirar hacia abajo, Ji Lan Zhi aún estaba profundamente dormido en sus brazos, sin darse cuenta de que había estado allí toda la noche.

Aunque bromeó con Ji Lan Zhi diciendo que lo acompañaría a dormir hasta tarde, Wen Jun no planeaba volver a dormir en este momento. Observó la cara de su hermano mayor durante un rato antes de levantarse lentamente, ponerse el uniforme de discípulo y salir de la habitación.

Aunque no tenía que asistir a las clases de la mañana, todavía tenía que encargarse de llevar la comida a su hermano mayor.

El menú del comedor cambiaba todos los días, y el desayuno de hoy era fideos de cristal con nabos encurtidos, un plato por el que Ji Lan Zhi se esforzaría por levantarse y comer incluso si estuviera exhausto.

La belleza enferma tiene cola- BLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora