Destino (Artielocks)

Puente de los trolls

Ella accedió a llevar al rey hasta donde había vendido las joyas, y él inmediatamente la bajó, diciéndole que confiaba en que ella no huiría, que sólo la encontraría de nuevo, que no importaba. Por mucho que le hubiera gustado golpearlo en la cara con una piedra (otra vez), tenía más sentido recuperar el anillo.

  Durante tres horas caminaron Arturo intentó iniciar una conversación
_entonces robas?_
_jajaja esta es tu forma de iniciar una conversación?.No intentes relaciónate conmigo_
_solo intento hacer esto un poco más tolerable_
_¿el niño el rey extraña su castillo con miles de sirvientes. Debe ser divertido una vida?_
_ no crecí en un castillo_
-te encerraron en una torre?_ dijo con un poco de burla.
_jaja que graseosa- dijo con un poco de sarcasmo.

Ricitos echaba humo mientras se abría paso por el bosque. Detrás de ella, él caminaba tranquilamente, pero al mismo tiempo perdido.Era un chico de juntas del parlamentos , inauguraciones, eventos reales no uno de bosque. Incluso antes cuando era un simple estudiante de quien nadie esperaba nada Arturo era una persona de interiores  pero ella se sentía perfectamente al aire libre y sobre todo en el bosque. Cerca del mediodía él pidió un descanso y ella se apoyó contra un árbol, mirando hacia el oeste.

  -¿Y qué es eso?_preguntó.

  Se dio cuenta de que estaba jugando con el amuleto que llevaba alrededor del cuello. _No es de tu incumbencia_dijo, alejando la mano del cristal.

  -Ahora lo es_, y con un rápido movimiento de agarre, agarró la delicada cosa y se la sacó del cuello.

  "¡Ten cuidado!" ella lloró. "Es un arma. Es polvo de hadas. Transforma a cualquier enemigo en algo fácilmente aplastable".

  El joven, divertido, alzó una ceja y estudió el pequeño frasco de vidrio.
-Es eso así?" él dijo. "¿Y entonces por qué no lo has usado conmigo?"

  _Lo estoy guardando para algo importante_dijo Ricitos.

  _Algo importante?_

_No es asunto tuyo_

-Que será tan valioso que necesitas polvos mágicos para ser robado?_

_No es un robo, es un rescate_

Èl vio su preocupación en su rostro.Quien sea que estaba buscando era alguien importante y querido.

-ten, suerte.Espero que lo logres-

  • • •

  Una hora más de caminata.

  -¿Alguna vez has conocido a un troll?-
-tengo parientes ogros.Son similares ?

  _Solo no hables déjamelo a mi ,debemos tener cuidado_y luego lo condujo hasta el viejo puente de piedra.

  Odiaba a los trolls, pero no eran los peores socios comerciales. Siempre tuvieron oro y siempre parecían dispuestos a comprarle bienes robados. Con el corazón latiendo un poco más rápido que antes, Ricitos se estabilizó, respiró hondo y juntos caminaron hasta el centro del puente.

  Al verla mirándolo, le sonrió.

  De hecho, se encontró un poco desarmada por eso.

  "¿Qué?" ella dijo.

  "¿Ahora que?" dijo, acercándose al borde, mirando hacia abajo. "¿Hacemos ruidos de troll?"

  "No", dijo, alcanzando su bolso. "Llamamos a su puerta".

  El líder de los trolls fue el primero en saltar por la borda. Flaco, arrastrando los pies, cubierto de musgo y tierra, se impulsó hasta el borde y se enderezó, con sus dos metros y medio de altura. Ricitos tocó la mano de Charming, que él había movido hasta la empuñadura de su espada, y sacudió la cabeza. Él la miró y lo dejó caer.