Cap.15 Nunca fuimos los malos (segunda parte de todo aflote)

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El tercer hermano asintió y se alejo un poco de sus hermanos queridos Zev y Eugene. Divago por sus pensamientos de cuándo antes eran felices y no hacían daño a nadie.

**Flashback**

Zev: Hermanitos, vámonos a casa qué mamá y papá nos están esperando.

Eugene: Es cierto.

???:Sí, vamonos antes de qué se haga de noche.

Los tres queridos hermanos se fueron a su casa y abrazaron a sus padres. Esos tiempos eran felices, no teníamos problemas con nadie, éramos muy amigables y amistosos con todos. Pero... todo cambió ese seis de noviembre, cuándo llegó el día de la casería. Mis padres y mis hermanos estábamos jugando al escondite, les tocaba a mamá y papá encontrarnos. Mis hermanos y yo nos escondimos en una cueva en un rincón oscuro. No llegaron ni a pasar 5 minutos y escuchamos dos disparos, al principio nos asustamos pero después pensamos qué le habrían dado a cualquier animal. Pasaron las horas y empezamos a preocuparnos de que no nos encontrasen, pensamos qué los disparos de hace dos horas serían de ellos pero nos negábamos a ver ese pensamiento. Pero para salir de dudas salimos de la cueva y corrimos por el bosque hacía el lugar donde tendrían qué estar mis padres. Cuándo llegamos jadeando de la carrera qué habíamos hecho. Mis hermanos y yo se nos abrieron los ojos como platos, cuándo vimos un charco de sangre y a nuestros padres muertos. Nos apresuramos y nos acercamos. Con nuestros hocicos. Intentamos despertarlos.

???, Eugene y Zev: Mamá, papá, despertad por favor. No sigáis durmiendo más. ¿Por qué estáis manchados de sangre?. Os fuisteis de cacería para traernos algún ciervo y conejo.

Lloramos desesperados porque no teníamos por lo peor mís hermanos y yo al ver qué no obteníamos ninguna respuesta de mis padres. Acercamos nuestros oídos a sus pechos y no latían su corazón. Nos alejamos de mamá y papá porque escuchamos pasos de los seres humanos. Mis hermanos y yo nos escondimos en un arbusto y pudimos ver cómo se llevaban a nuestros padres.

Eustaquio: Qué bien dos cambiaformas de un tiró y más siendo lobos, cómo me gusta a mí una buena cacería en pleno otoño.

Luis: Desde luego y eso no se discute contigo, amigo mío.

Los dos cazadores se llevaron a los lobos y los hermanitos con las orejas agachadas salieron del arbusto y se fueron a la cueva de su abuela. Ella los crío con cariño desde los 5,6 y 10 años por la muerte de sus padres. Dos años más tarde nuestra abuela también la mataron delante de nuestras narices. Luis intentó atraparnos y tuvimos qué correr a toda pastilla para no ser atrapados. Pero fue inútil porque nos atrapo a los tres en un barranco. Nos llevo en dónde se encontraba su amigo Eustaquio el cuál cargaba a nuestra abuela. Desde ése día, nos encarcelaron y nos empezaron a maltratar. Hasta tal punto qué nos pusieron collares eléctricos los cuales nos dejaron marcas en el cuello. Cinco largos años pasaron y un día perdimos la razón de ser y acabamos con los cazadores qué eran los primos del padre de Akira. Matamos también al hermano del padre de zane y pues paso lo qué pasó. Los matamos. Desde entonces solo buscamos la venganza.

**Fin del flashback**

Me quedé un rato llorando por recordar a mis padres y mi abuela, mire el cielo estrellado.

???:Buenas noches mamá, papá y abuela. Os extrañamos mucho, se qué no os gusta qué matemos y más por la venganza. Pero no podemos cambiar eso.

Me sequé las lágrimas y me fui a dormir con mis hermanos.

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