Él Narcotrafíco en la Moda

Capitulo 29

Max
Kelly era una diosa andante desde ese día que la vi tenía enamorarme y que sepa en realidad a donde es que pertenezco y mi pasado. Se que soy un hijo de puta sin conocimiento alguno sobre lo que sientan los demás, pero esta noche me hizo tocar el cielo por un momento salí del infierno de donde venía. Ya era mía la hice mía y se que aunque ahora todo se desbordo e siempre será mía porque no permitiré que alguien más la tenga.
Me estaba bañando y mi celular suena Kelly esta dormida no quería despertarla por eso salí rápido y conteste era Leo.
- qué hay hermano- salude.
- estoy hijo de puta de los Toricelli nos tumbaron otro encargo ya va medio millón Max- dijo tirando no sé qué.
- no te preocupes es como si no quitaran un juguete- dije suspirando- pero ya sabes que hacer - dije y mire a Kel dormir.
- estás con ella cierto- pregunto y rodee los ojos.
- si estoy con ella y ya paso anoche- sabía que se iba a emputar pero no me importó- tú hermana es mía ahora Leo y no te atrevas a intervenir- advertí.
- hijo de puta te dije que no te quería cerca de ella la vas a terminar llevando a la muerte eres un cabron- me grito.
- exacto en eso tienes razón pero nadie la tocará sobre mi cadaver- le respondí.- te veo luego- colgué.
Me puse un bóxer negro y me heche desodorante perfume y crema me vestí como de costumbre de traje negro. Me acerqué a la cama y Kel estaba dormida.
- buenos días- susurró y ella se volteo a verme.
- hola- dijo y se veía más hermosa que de costumbre.
- ya me voy- avise- si te quieres quedar a descansar esta bien- dije besando su frente.
- tengo que ir- hizo para sentarse y se quejó- ah me duele- dijo volviendo a acostarse.
- perdón- pronuncie y mire a un punto fijo se que cuando estoy no pienso en nada ni me contengo.
- hey mírame tranquilo- dijo sonriéndome- estaré bien ve a trabajar- dijo acariciando mi cara.
- si necesitas algo solo llámame abajo estará Judith le diré que venga a ayudarte ¿esta bien?- dije y ella asintió.
- Gracias- susurró y la bese y baje.

Baje y me encontré con mis hombres ya esperándome abajo.
- buenos días jefe- dijo Dany.
- cómo están muchachos hoy tenemos algo que hacer no sé si Jaxon les dijo del cargamento perdido- los mire y asintieron- pues iremos por esos hijos de puta- sonrei.
- buenos días mi niño como amaneciste- pregunto Judith.
- bien Judith te quería pedir un favor- dije- arriba esta Kelly y eh pues ya sabes eso de cuando le quitan- no me dejo terminar.
- ah mi niño siempre metiéndote en esas cosas no te preocupes yo le ayudo le subiré el desayuno- dijo negando.
- Gracias- sonrei- ella es un ángel es como si fuera la misma paz y calma en persona- dije.
Ella sonrió- hace mucho no te veía así mijo- me abrazo- tranquila la haré sentirse cómoda- dijo y comenzó a preparar la bandeja.
- Judith- la llame- ella no sabe nada ¿esta bien?- dije y asintió.
- vamos - dije y salimos de la casa.
Fuimos a almacén fuera de la ciudad por lo visto ya Leo estaba aquí con Jaxon.
Me baje y entre le dejé claro a mis hombre que estuvieran pendiente de cada movimiento que haya afuera.
- qué tene...- no termine porque ya tenía a Leo encima de mi.
- hijo de puta- dijo dándome en el estómago le respondí y en menos de 3 segundos ya estaba en el piso.
- piénsalo 2 veces antes de venir a joderme gracias a mi respiras hijo de puta- le grite.
- por que ella sabes que la joderas- dijo negando.
- la protegeré con mi vida y lo sabes- dije- déjate de pendejadas- dije- a lo que vinimos qué hay- le pregunté a Jaxon que estaba riendo.

- bueno nada fuera de lo normal nos roban la mercancía en el mismo punto siempre comienzo a sospecha qué hay alguien infiltrado en nuestra organización porque 2 veces corridas medio millón de dolores que nos tumban- dijo concentrado- sospecho de Kora, Kora no comenzó no hace mucho y cuando comenzó es exactamente las fecha que nos han tumbado el cargamento- dijo poniendo una foto del tipo en pantalla.
- bien vamos por el- dije.
- no yo iré por él el no te conoce por lo tanto si te ve va a saber qué hay algo mal- dijo Jaxon y asentí.
- bien tráelo aquí- dije.
Extrañaba estar con Kelly.

Kelly
Desperté un rato después de Max se fue estaba adolorida mire la cama y tenía la mancha de sangre de que ahora si era una mujer completa. Me paré como pude y fui al baño me di una ducha con agua caliente para relajarme.
Tocan la puerta
- quien- pregunté.
- soy yo señorita Nelly, Judith- dijo y sonreí era un amor.
- pasó Judith- dije- estoy en el baño- avisé.
- buenos días niña el señor pidió que la ayudara y que le subiera el desayuno- dijo y asentí.
Me ayudó a terminar me dolía demasiado la entre piernas pero Judith me trajo unas pastillas para el dolor.
- Gracias Judith- dije- Max regresará tarde- le pregunté.
- ah señorita no tengo esa información- dijo apenada.
- no te preocupes yo desayunaré e iré al centro tengo que trabajar- le dije y asintió.- iré a mi casa a buscar ropa- y ella negó.
- señorita el señor le dejó ropa ósea ya se la había comprado por eso se la voy a dar- dijo buscando algo en el closet era ropa de Zara.
- pero como- quede muda.
Judith sonrió- cosas del señor- dijo y se fue riendo.
Saque la ropa era una falda de cuero marrón con una camisa de cuello tortuga blanco una blazer crema y unas botas a mitad negras me encantaba. Me lo puse y vi que compro maquillaje también lo use me peine y salí.
- JUDITH ME VOY- le avise.
- nos vemos orita señorita- se despidió.
Salí y mire ¡ja! Como me iba a ir no tenía mi guagua, mire el garaje y tenía muchos autos pero muchos y lujosos, llame a Max porque tampoco veía a uno de sus hombres de confianza.
Llamada Max
- buenos días amor- respondió y sonreí- cómo te sientes- pregunto.
- buenos días cariño eh algo adolorida pero bien- dije.
- todo bien ¿pasó algo?- pregunto.
- eh no bueno si en realidad- dije nerviosa.
- qué sucedió Kel- dijo en tono serio.
- eh ehm lo qué pasa es que necesito ir a trabajar y pues salí y no veo a ninguno de tus guardias que pueda llevarme al centro y vi tu garaje con muchos autos pero - me corto.
- tranquila- lo escuche reír- toma el Audi color gris oscuro- dijo.
- enserio seguro- pregunté- nadie suelta sus autos así- le dije.
- tranquila confió en ti- dijo- bueno amor te tengo que dejar ando algo ocupado- dijo.
- está bien, adiós- dije y colgué.