Anastasia Steele & Christian Grey ( La bailarina ) (Adaptación)

La Bailarina ( Capitulo 12 )

Al día siguiente, Christian fue temprano al hospital. Ahora, con ayuda de las muletas, Anastasia al fin podía mantenerse de píe y caminar. Christian la ayudó a acomodarse en el asiento de copiloto de su auto y manejó en dirección a su departamento. Cuando llegaron, Christian se preocupó que se sintiera cómoda otra vez e insistió en quedarse junto a ella el resto del día. Si bien, Christian había pensado en decirle que se fuera a vivir con Kate en su departamento para que mejorara bien, se arrepintió y decidió ocultar sus verdaderas intenciones. No quería que Anastasia se aterrara y le negase. Pero lo cierto era que ella no pensaba igual. Ya había pasado un mes desde la operación, y con cada día que pasaba, Anastasia estaba más convencida de los verdaderos sentimientos que sentía hacia él. Cada día Christian aparecía en su departamento después de la universidad para asegurarse de que estuviera bien, y cuando se trataba de dejar a Kate a la escuela, él estaba ahí para eso. Era perfecto. Anastasia se despertaba ansiosa con que el tiempo pasara rápido para ver a Christian , pasaba la mayoría de su tiempo junto a él y añoraba el día en que pudiera decirle de una vez por todas lo que sentía por él. Pero cada vez que lo intentaba, terminaba sonrojándose y cambiaba de tema bruscamente ante el miedo de que él la viera nada mas como una amiga. Lo cierto es que Anastasia prefería ocultar sus sentimientos y demostrarle cuanto lo amaba nada mas en los miles de sueños que ha tenido con él.- ¿Cómo te sientes hoy?- le preguntó Christian , mientras se sentaba a la orilla del colchón.- Bien, ahora que al fin te veo.- las palabras salieron de su boca antes de que pudiera detenerse.Anastasia se sonrojó. Christian sonrió. - Yo también me alegro al fin de verte, cariño.- Christian , ¿Hoy fuiste a la universidad?Christian había llegado temprano al departamento de Anastasia . Dejó a Kate a la escuela y cuando volvió, se quedó con ella el resto del día. Lo cierto es que había faltado más de cuatro días a la universidad, y solamente para estar con Anastasia , porque preferiría estar cuidándola a ella y disfrutar de su compañía. - De hecho no.- respondió él con sinceridad. - Pero Christian .- se quejó.- has faltado ya muchos días, tienes que ir...- Prometo que mañana iré, ¿Vale? Ahora quiero saber cómo está tu tobillo.- dijo, mientras se levantaba y se sentaba en la cama a la altura de sus pies.- el médico dijo que tienes que empezar a hacer más ejercicio para que tu tobillo se acostumbre al movimiento.Anastasia bufó. Odiaba cuando Christian cambiaba de tema, pero la verdad era que le agradecía por su preocupación. - Está bien.- dijo ella.Él tomó su pie con delicadeza y lo colocó sobre sus muslos. Anastasia llevaba puesto un pequeño short de pijama y una simple polera de tirantes. Christian sonrió cuando vio que sus uñas estaban pintadas de un rojo carmín. Deslizó su mano sobre la cicatriz en donde la operaron, la cual, ya estaba por cerrarse. Sintió a Anastasia estremecerse bajo sus manos.- Comenzaré con mover tu tobillo lentamente. Dime si te duele.- dijo él.Anastasia asintió, y Christian , con mucho cuidado, empezó a mover su tobillo. La tocaba como si tuviera miedo de que se quebrara. Anastasia gimió y al instante Christian se detuvo de golpe.- Lo lamento, ¿Te he hecho daño?- preguntó, mientras la miraba con preocupación.Pero lo que Christian no sabía era que Anastasia gimió por excitación. Sin querer. El tibio contacto de las manos de Christian sobre su piel la hacía estremecer y desear que sus manos subieran un poco más, deslizándose por todo su cuerpo.Anastasia se mordió el labio, evitando así de que otro gemido saliera de su boca y solo negó con la cabeza. - Bien.- suspiró Christian .- si te duele mucho, avísame y me detendré al instante.Volvió a mover su tobillo, y Anastasia se sintió morir. Si tan solo supiera las cosas que provocaba en ella cada vez que la tocaba...Él alzó la vista, y solo entonces notó lo excitada que estaba ella. Anastasia no traía sostén, y Christian presenció unos pechos firmes y la forma de sus pezones, erectos. Mordiéndose el labio, fue deslizando sus manos arriba, por toda esa piel que Christian moría por tocar una y otra vez. Mucho más arriba. Anastasia gimió cuando llegó a la altura de sus muslos. - Te pillé. ¿Te gusta que te toque, linda?- dijo Christian con la voz ronca.Anastasia bajó la vista y se encontró con los ojos de Christian , oscuros por el deseo. Abrió la boca para decir algo, pero antes de que pudiera hablar, él se inclinó y la besó.