Strangers to friends, friends into lovers/// Vico

Cap 92: Captain

Argentina era hermosa, Vivi ya había ido para jugar pero volver a ir era estupendo.
Como si fuera poco había llevado a sus seres queridos.
Vivi no tenía tiempo para pasear o ver los lugares turísticos, debía ir directo al Monumental.

El estadio era más grande que la ciudad de Coquimbo, pensó Vivi. Bueno quizás exageró un poco.
En el vestuario todo el mundo estaba callado.
No volaba ni una mosca y lo único que se escuchaba era el ruido de la lapicera del Dt.

Vivi no aguantaba más, se paró y esclareció su garganta:
"Siento que alguien debe decir algo y esa persona voy a ser yo. Les quiero agradecer por vestir la camiseta de la U con tanto orgullo. Las quiero felicitar por enorgullecer al club que tanto amo y decirles que llegar hasta aquí no fue fácil pero ahora es cuando viene la parte más difícil y hay que darlo todo.
Nos vamos a ir de Argentina con la copa en nuestras manos y dándole una alegría a nuestra gente. SALGAMOS A GANAR."
Grito Vivi y todas sus compañeras la acompañaron con el grito.

Antes de salir, el dt que veía a sus jugadoras fijamente, agarró la cinta de capitana y se la puso en el brazo a Vivi, que al principio no la quería aceptar pero luego de la aprobación de sus compañeras la vistió con orgullo.

Salieron a la cancha por el túnel y vieron el estadio lleno. Banderas, fuegos artificiales y artistas dando un show antes de comenzar el partido.
Habían cámaras por todos lados y los periodistas habían viajado de distintos países.

La presión se sentía más que nunca, observaba a los cantantes pero ni siquiera los escuchaba.
Habían llevado a Anitta por parte de Brasil y a Jere Klein por parte de Chile.

Terminó el show y las jugadoras se posicionaron en la cancha. Vivi miró hacia el banco buscando la aprobación de su dt, el cual guiñó su ojo.
Miro a sus compañeras las cuales se veían con ganas de comerse al mundo y se sintió confiada.
Vio al palco Vip y le sonrió a Cony.
Vivi tenía un buen presentimiento y nada podía derrumbarle su sueño o por lo menos eso creía.

El árbitro le preguntó a las arqueras si estaban listas y luego pitó el inicio del partido.