Historias cortas que se me ocurren por las noches, si vienes buscando momentos románticos que involucren a nuestro capitán favorito llegaste al lugar correcto.
Historias desarrollas en distintas épocas con distintos escenarios. (No confíen en mí no...
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Leonor Esto estaba muy mal, terriblemente mal ¿cómo habíamos llegado hasta este punto? Flotch estaba loco por completo mientras nos obligaba a llevarlo al paradero de Zeke, lo peor es que nos habíamos separado de todos los demás, francamente creo que habría una oportunidad de escapar si la que hubiese quedado atrapada en esta situación fuera Mikasa y no yo, para el combate era inútil y por la expresión de Hange sabía que ella no podría manejar a todos sola, nos superaban en número por mucho y morir así era muy tonto...
Mientras caminábamos la lluvia se intensificó, a todo esto ¿porque demonios traían a una doctora con ellos? ¿Porqué no solo secuestrar a la comandante de la legión? Bueno según Florch querían tener a alguien que los ayudara en caso de necesitar atender alguna herida de Zeke, aunque eso sonaba ilógico porque después de todo ¿El no era un portador de titán? Claramente sus heridas podrían curarse solas, aunque supongo que no eran tan inhumanos como para dejarlo sufrir dolor, claro después de todo lo veían como un Dios Salvador.
En un momento del camino nos topamos con una escena demasiado extraña, un titán yacía sentado cerca de un río y a su lado...
—No...
—Leonor revísalo
La voz de Hange sonó contundente mientras ella también parecía descubrir quién era, ví a los soldados que nos rodeaban pero el que estaba a cargo hizo una señal para que no atacaran, me arrodille frente a él y contuve las lágrimas lo mejor que pude. Su rostro estaba ensangrentado, tenía los labios ligeramente abiertos y un enorme tajo había acabado con su ojo izquierdo, además su mano había perdido dos dedos...
—Capitán Ackerman,entonces así fue como acabó el hombre más fuerte de la humanidad ¡Qué lastima! Se desperdició mucho potencial—el hombre le hizo una señal a los soldados que custodiaban a Hange—. Corroboren que Zeke no esté por aquí y también asegúrense de que el capitán...
—Está muerto, nadie podría sobrevivir a una explosión tan fuerte
Exclamé cómo pude mientras lo abrazaba, su cara estaba cubierta de astillas, pero aún respiraba y no iba a dejar que esos malditos lunáticos acabaran con él.
—No puedo confiarme, además si este hombre acabó con Zeke...
Hange comenzó a discutir con Flock mientras yo buscaba una salida, pero no había ninguna forma de huir de ahí, estábamos atrapados a no ser que...
—¡El titán!
Exclamaron algunos hombres mientras las entrañas de aquella horrenda criatura se abrían y dejaba ver como un rubio completamente desnudo salía intacto, no sé cómo fue que la comandante actuó tan rápido pero un segundo después ella, Levi y yo estábamos en el río y ambas nadamos rápidamente a lo más profundo arrastrando al capitán con nosotras, yo tenía miedo de que inhalara agua pero era esto o morir por sus balas, la corriente del río fue de gran ayuda ya que nos arrastró lejos y pronto pudimos salir a la superficie, aún así caminamos por un buen rato hasta que llegamos a un lugar montañoso muy cerca del bosque de los árboles gigantes, ahí logré por fin atender a Levi, y aunque quise no pude evitar llorar, verlo tan herido era francamente horrible y lo peor es que no había mucho que pudiese hacer.
