El hijo de Neptuno -COMPLETO-

Capítulo 43

Ha sido más largo de lo que me gustaría desde mi última actualización. Espero que dos capítulos en un día también ayuden a compensarlo.

Capítulo 43

Reyna

"Lo que en el nombre de Roma es eso?" jadeó Reyna.

Salacia o más bien Anfitrite sin volver a mirar a la hija de Minerva respondió...

"Eso, querida, es Polybotes, hijo de Gaea, y perdición de mi esposo Poseidón. Él es el futuro gobernante del mar."

Reyna se comentó a sí misma, "Es horrible!"

"Cuidado..." advirtió a la reina del mar, "No dejaría que te escuchara decir eso..Cierto aunque sea."

Y era cierto. El Gigante, porque eso es lo que él fue, tenía más de cuarenta pies de altura. El físico de la bestia se parecía al de un nadador profesional...largo y delgado. Sus músculos no eran grandes, pero estaban bien definidos. La mitad superior de su cuerpo estaba cubierta por un conjunto de dos tonos de piel...el blanco frontal y el gris posterior. Sus piernas estaban invertidas articuladas como un pájaro o un dragón y cubiertas de escamas plateadas. Sus pies eran de tres dedos, palmeados y arañados. A los lados de los antebrazos y la parte posterior de las pantorrillas del monstruo había protuberancias similares a las de un tiburón. Tres de los mismos apéndices corrían paralelos entre sí desde la parte superior de su cabeza hasta la parte posterior del cráneo como Mohawks. La cara de Polybotes era ancha y estrecha como un queso de cuña...la parte posterior de la cabeza redonda y la cara que se juntaba en un punto. La criatura'sus ojos eran de color negro sólido y su boca estaba forrada con dientes puntiagudos.

Reyna estaba dispuesta a apostar que esos dientes estaban dentados como los de un gran tiburón blanco; porque eso es lo que Polybotes le recordó.

Reyna quería preguntarle a la diosa por qué haría tal cosa, pero la llegada más reciente a la cueva marina la golpeó hasta el golpe.

"Madre, ¿por qué?"

Amphitrite se volvió y miró a su hijo, "Triton estoy haciendo esto por ti."

"Triton...Madre?"

Reyna miró más de cerca al joven merman de piel verde con una armadura de bronce con tachuelas de perlas reales. ¿Fue realmente el Heraldo de Poseidón? En su mano agarró un tridente, y unido a su cinturón había un cuerno de caracola que se decía que podía calmar el mar y asustar incluso a los monstruos más terribles...todo con un solo golpe.

"Calma el mar?"

"La explosión del cuerno.." Reyna anunció, "eres tú quien detuvo a los tritones que nos atacaron. Me salvaste la vida!"

El Heraldo de Poseidón no le perdonó ni una mirada mientras asintió.

Luego continuó su pregunta, "¿Qué quieres decir...¿Hizo esto por mí? Cómo podría traicionar al Padre y liberar a nuestro enemigo más mortal posiblemente ayudarnos?"

"Te pediría que no hables de eso infiel el hombre en mi presencia." ordenó a la diosa.

"Cómo es que yo soy el que se quedó atrapado en medio de una disputa familiar?"

"Infiel..." dijo Triton casi con incredulidad, "¿de eso se trata esto? Estás molesto porque el Padre tenía otro trust con un mortal?"

Ahora Reyna era la que no podía creer lo que estaba escuchando. Qué típico de un chico pensar que no era nada para un hombre ser desleal con su cónyuge. La hija de Minerva de repente se encontró con ganas de lanzar con Anfitrite y ayudar a poner a Poseidón en su lugar.