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━━━ Psycho Dreams
Advertencia.// El siguiente contenido puede ser muy sangriento y descriptible y/o visible(imaginativo) todo lo que será leído puede llegar a ser incomodo hasta de cierta forma intimidante u ofensivo. Por favor discreción al leer el siguiente contenido.
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El moreno salió del callejón junto a una criatura peluda, sus rasguños habían sanado, sin embargo las heridas abiertas en su rostro y cuerpo no cerraron, el sangrado era menos pero aún había un rastro de sangre fresca saliendo de estas... Apenas y si podía caminar apoyándose con las paredes u objetos inanimados, las gotas de lluvia lo acompañaban con la maldición, las cuales arrastran la sangre de sus heridas.
De pronto sintió un jaloneo muy brusco en su brazo, haciéndolo caer, con temblores violentos por el frío y el dolor miró a su contrario o contrarios, desde el suelo... Abrió sus ojos de en par en par, sus pupilas se dilataron, su boca se separó levemente y exhalo miedo y horror, no; eso es quedarse corto, se sentía imponente por aquellos alfas.
"La puta sobrevivió ja-ja-JA" Burlón y eufórico tiró su mochila al suelo, su uniforme mojado dejaba ver un cuerpo bien entrenado. El omega, se levantó rápidamente, todo se le hacía muy grande, él era muy lento eso creyó, sus vistas rojas por la lluvia no le permitían ver su panorama, estaba muy inmerso en correr que no sabe cuando se cayó y lo acorralaron.
"Omega tonto, no puedes ni siquiera correr. Deberías comer menos... Oh ya sé, no comas, estas muy gordo" El líder agarró de los pelos a el moreno, con mucha fuerza, comenzó a estampar la cara del azabache una y otra vez, la sangre se esparció nuevamente en la acera...
Un latido muy fuerte.
Soltó un grito acompañado de un escupido de sangre fresca.
Otro latido...
Se oían gritos cada vez más desgarradores mucho más dolorosos, llegando a terceros que alborotados comenzaron a ver el suceso sin hacer nada... 'Pues el beta desafío al alfa al tocar a su omega'.
Un latido débil...
Un albino apareció corriendo muy rápido, pateó al alfa en el rostro, una vena se marcó en la cara del alfa albino al notar el estado muy deplorable de su omega... La sangre le hervía, todo su cuerpo se doblegó ante el coraje, gruño a los alfas, quienes se pusieron en guardia y firmes se pararon.
"Ahora vino el alfa del omega" Se hecho a reír con el resto de alfas. Pobres tontos, tan inocentes... "Un viejo engreído y el omega africano" La gota que derramó la paciencia del albino, en un rápido movimiento se sentó encima del líder de el trio.
"Primera regla: no tocar a mi omega" Golpeo el vientre de los alfas haciéndolos escupir sangre y saliva, "Segunda regla: Si los vuelvo a ver no los lastimaré... Los matare" Estampó la cabeza de un castaño haciendo grietas en el suelo." Ahora pide perdón" Alzó la cabeza del castaño dejando ver la destrozada cara del alfa "Ruega por el perdón de mi omega, si él cede me detendré" Apretó la cabeza, su lado alfa le demandaba matar al castaño.
"G-Gojo, detente" Titubeo un poco viendo el rostro de súplica de los tres alfas de secundaria muy horrorizados, con algo de esfuerzo gateo y jalo suavemente el pantalón del albino. "Detente" Gojo gruño, liberando al chico.
Los tres alfas quedaron en la acera inconscientes...
"Ai-Chan..." Susurro agachándose para ver al omega con los ojos vacíos opacos, le dolió ver a su omega en ese estado, se detestó por percatarse demasiado tarde. Agarró al omega en brazos, abrazándolo necesitaba el calor de su omega y él el suyo, ambos se necesitaban.
Los terceros se esfumaron como polvo dejando solo a los destinados.
"Gojo, ¿tu eres mi alfa?.." Débilmente se acomodo en los brazos de el susodicho, éste eufórico asintió en visto bueno "Enamórame en otra vida..." Cerró sus ojos. Lo dicho por el moreno asustó al albino quien muy asustado empezó a temblar.
"No. No, no... Ai, mírame hazme el favor de mirarme" Su cuerpo se movió rápidamente corriendo al hospital más cercano de Tokio . pero estaba muy emocional y el clima no ayudaba, sacó su teléfono llamando una ambulancia.
Las sirenas de la ambulancia alertaron a los terceros retirados, comenzando a acercarse a la raíz del escándalo.
Una mujer de tés morena, fue atraída por su curiosidad, se acercó al núcleo percibiendo un fuerte aroma a sangre y feromonas de tristeza pura. Con algo de esfuerzo logró alcanzar a ver un rostro familiar, y a un hechicero muy popular.
"¡Ai-san!" Apartó a la multitud bruscamente, sus lágrimas no se hicieron esperar y el llanto inundo su rostro, sus piernas no aguantaron más y cayó de rodillas, sintió un estrujón en su pecho, un nudo en su garganta pidiendo salir en un grito.
Todo era muy caótico...
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Pekeña bonificacion por su incesante espera ;U;
bueno esta algo pekeño pero es un bono despues podran saber el resto.
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