30 Días - Ran Haitani

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Perdieron la noción del tiempo al pasar besándose sin descanso en el sofá del living y aún que la situación se estaba desbordando de tan calientes que ambos estaban, Ran sabía perfectamente que Natsuki era virgen y aún que quisiera desposarla ahí mismo en pleno sofá, la quería lo suficiente como para esperar y respetarla o al menos ir más lento si es qué sus ganas podían aguantar más tiempo

Cosa que no solía hacer para nada con otras chicas aún que nunca había tenido una relación amorosa en serio, no era del tipo de hombre que tomaba en serio ni respetaba a las chicas vírgenes con las que se metía, Pero sabía perfectamente que su bella Natsuki era especial y debía tratarla como tal

—Lamento haberme alejado, no quería lastimarte con mi inmadurez— susurró en sus labios mientras acariciaba suavemente su mejilla

—Alejarte fue inmaduro, Ran— respondió conectando ambas miradas —,Pero aún así te quiero—

"Te quiero" hizo mil sonidos dentro de su cabeza sintiendo su corazón latir desenfrenadamente

Sentía tantas cosas por ella...

Era algo anormal la cantidad de emociones explosivas que provocaba Ella en Ran con tan solo acciones o palabras

Y eso no era nada bueno para un hombre depravado, abusivo, malvado y mujeriego como él. Era claramente una señal de qué estaba cayendo totalmente en las redes del amor y la fidelidad
Él sabia perfectamente que era el hombre más infiel del planeta, amaba a las mujeres de todas las tallas se metía con cualquier ser femenino que tuviera vulva y esa era su realidad desde los 13 años...Pero Ella tenía algo que lo traía tan loco que por primera vez en su vida quería hacer algo bien con una Mujer, por primera vez quería amar y entregarlo todo solo a una persona

El amor que sentía hacia ella, Era la única emoción con la que Ran no pudo lidiar jamás
Y le tocó aceptar todo ese amor para entregárselo de una vez por todas

—Ran y yo tal vez...— arrastraba cada palabra evitando completamente el contacto visual con su amiga por temor a su reacción

—¿Están saliendo?— Preguntó yendo directamente al grano y entonces a Natsuki no le quedó nada más que asentir atreviéndose a dirigirle la mirada

—Pues... anoche fue a mi casa y nos besamos— confesó avergonzada pero era un detalle que no podía ocultarselo a su mejor amiga

—Awww!! estoy muy feliz por ti!!— saltó de emoción abrazando fuertemente a la castaña quien por supuesto no se lo esperaba para nada, esperaba una respuesta mucho más negativa y una reflexión del por qué no debía estar con un chico como él pero Kami solo se conformaba con qué Natsuki fuera feliz

Claro, lo que Kami no sabía era que el hombre que había noqueado a su novio con un ladrillo hace unas semanas atrás era el mismísimo primer amor de su mejor amiga

—Señoritas! Una más y se van las dos— Amenazó el profesor perdiendo la poca paciencia que le quedaba

—Espero que vaya en serio contigo por qué si eres una más en su lista, él será uno más en mi lista de homicidios— dicho eso miró hacia atrás únicamente para mirar con odio a Ran pero este sabía perfectamente de lo que estaban hablando las chicas y la miró con una sonrisa moviendo su mano saludandola pero Kami solo le levantó el dedo de al medio amenazantemente