Hola.
Perdón si no he escrito lemon últimamente.
No se me da muy bien eso ya que a mí me gusta ser muy detallado y pasional en esas escenas y honestamente eso da pereza de escribir.
Se lleva casi medio cap el escribir puro lemon y la verdad es que mejor me lo ahorro para otro día en donde tenga tiempo, puesto que en estos días me van a explotar laboralmente jajaja.
Así que espero que entiendan el porque me saltó la escena con Mei Mei, pero descuiden, le haré una buena escena de lemon a cada una.
Ya sea para el final del fic o para las OVAS posteriores que vendrán.
Dicho eso, si te parece entonces genial, eres de los míos.
Sino te parece, puedes irte a la mierda y crear tu propia historia.
Aquí solo estamos a los que les gusta el romance y la sátira.
O eso creo.
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19 de febrero del 2022.
Unos meses antes del mundial.
Yuyi Itadori estaba acabado.
Y es que emocionalmente se sentía sumamente mal debido a lo acontecido con una de sus maestras.
Si bien él era tranquilo y en raras ocasiones reservado, ahora podía decir que eso había desaparecido por completo.
Y es que a su mente viene todo lo que hizo con Mei Mei después de ingresar a su habitación en la escuela.
Aunque claro, podría justificar eso diciendo que todo fue por culpa de sukuna, pero en primera lugar eso sucedió debido a su insensatez y por no tomar buenas decisiones.
Y prueba de eso era el resultado que se dió hace tan solo unas horas atrás.
Sukuna hizo lo que quiso, y él únicamente tuvo que observar sin poder hacer nada el como fue que trató a una mujer que no era absolutamente nada para él, más que su maestra de profesión.
Y por mucho que el sienta cariño por ella o por alguien más, jamás llegaría a un punto en donde haría algo que claramente no era de su agrado.
Incluso si así fuera, el pediría permiso en todo caso, y también lo haría con alguien a quien ame verdaderamente.
Es por eso que ahora, después de haberse vestido y salir de su cuarto, se fue a dar una vuelta por la escuela.
Aún era bastante temprano, por lo que era imposible para él ver a alguien levantado a esas horas.
Y eso estaba bien, puesto que así iba a poder tomar aire y reflexionar a todo lo que había hecho por el momento.
Por lo que siguió con su camino hasta llegar a un rincón de la escuela en donde podía visualizar parte de la ciudad, que estaba a la espera del dichoso amanecer, por lo que él se quedó ahí y esperó pacientemente a que el sol saliera para empezar la jornada de muchos.
- supongo que esa son las consecuencias de darle el control...-
- no te sientas mal mocoso...admite que lo disfrutaste.-
- hacer cosas en contra de mi voluntad no es disfrutar...así que ni al caso tu comentario.-
- tu mismo hiciste el pacto conmigo, así que en lugar de llorar es mejor que aprecies lo que te estoy dando.-
- a eso no se le puede llamar aprecio. Yo no soy así.-
- pues es mejor que te acostumbres, ya que yo odio que otros se crean superiores a mi, así que vete haciendo a la idea de que ahora en adelante, tu tendrás el control absoluto de todo.-
