Cap. 3 - El primer día

8 2 0
                                    

Después de tropezarse y caer al suelo, Teo levanta la mirada y logra ver un rostro muy familiar de una bella chica que le dió la mano para que se levante del piso.

-¡Hola, Teo!, ¿cómo has estado?- preguntó la chica, como si ya se conocieran de tiempo atrás.

Teo confundido se levanta rápidamente, -¿Quién eres?, ¿Nos conocemos?- preguntó con voz baja y desviando la mirada.

Claro que sí!, ¿acaso ya no me recuerdas?- respondió la chica que afirmaba conocerlo.

-Mmm..., creo que no, lo siento, ¿Pero puedes decirme quién eres?- insistió Teo.

-Soy Emmy- respondió frunciendo el entrecejo y haciendo una cara burlona.

Teo se queda pasmado al saber que aquella chica tan linda era Emmy, su vecina y única amiga que se mudó hace 4 años y no supo más de ella.

-¡EMMY!- gritó de alegría, algo que es muy raro en él, pues no le gustaba alzar la voz, pero ver a su amiga de toda la niñez lo emocionó mucho.

-¿Qué haces aquí?, ¿cuando regresaste?, ¿a dónde te habías ido?, ¿cómo has estado todo es tiempo?- preguntó sin parar a Emmy, ya que quería saber que había sido de la vida de aquella única persona que lo entendía tan bien.

-Wow, son muchas preguntas, pero te las responderé después porque he regresado a la ciudad- respondió calmada y sonriente a Teo.

Teo por un momento dejo su timidez y la abrazó como a nadie en mucho tiempo, pero se le olvidaba que tenía que ir a la escuela y ya era muy tarde.

-Bueno, Teo, ya me tengo que ir, mi mamá está desempacando las cosas y debo ayudarla- se despidió Emmy, pero sin antes darle un abrazo y un beso en la mejilla.

Mientras Emmy se iba caminando a casa, Teo reaccionó, se dió cuenta de que ya era tarde y la escuela estaba por cerrar las puertas. Corrió velozmente para no llegar tarde el primer día de escuela, pues no le gustaba tener que soportar a esos chicos molestosos, pero jamás sería impuntual.
Llegó cuando la puerta estaba casi cerrada y Anna, la conserje, lo dejó pasar porque aparte de Emmy, Anna era una señora muy buena con él y siempre conversaban de sus días en la hora del receso.
Teo entró rápidamente y buscó su nuevo salón, entró con miedo, interrumpiendo la presentación de los estudiantes.

Un Año Con TeoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora