Capítulo 24

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Capítulo dedicado a user80907764 💜

          En el apartamento de Jungkook, Jimin estaba sentado en la cocina, mientras revolvía distraídamente en su plato algunas sobras de la noche anterior, que no llegaron a probar por su estancia en el hospital

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          En el apartamento de Jungkook, Jimin estaba sentado en la cocina, mientras revolvía distraídamente en su plato algunas sobras de la noche anterior, que no llegaron a probar por su estancia en el hospital. Habían estado toda la noche monitoreando al detective cada cuatro horas, verificando que no hubiera algún cambio peligroso secundario al trauma.

          Habían regresado hacía apenas un par de horas y Jungkook llevaba casi todo el tiempo durmiendo. Entre el golpe, el precario descanso nocturno por las continuas revisiones, y los analgésicos, no era de extrañar. Sin embargo, el descanso de Jeon había comenzado después de una llamada a Namjoon, donde le había pedido que investigara algo sobre el antiguo alcantarillado. Jimin tuvo que cruzarse de brazos frente a la puerta de la oficina y casi obligarlo a ir a la cama.

          —Lo siento, no podía posponer esta llamada. No te preocupes, ya me siento bien —había dicho, solo para caer rendido pocos minutos después, noqueado por los medicamentos y el agotamiento acumulado.

          El resto del tiempo, la mente de Jimin había divagado entre pensamientos difusos, sobre muchas cosas y a la vez sobre nada. Ciertamente, estaba algo agotado, pero había tenido días y noches peores en el pasado, y no lo habían afectado tanto. Miró la comida en su plato, hecha un revoltijo amorfo de tanto revolverla y sin haberla probado. No tenía nada de hambre, a pesar de llevar más de doce horas sin probar bocado. Soltó un pesado suspiro y fue al sofá de la sala, donde se recostó a observar el techo.

          Pensó en Jungkook y en cómo se había arriesgado en su búsqueda de evidencia. Al igual que cuando lo rescató de las jaulas y las peleas subterráneas, el detective había ido mucho más allá de sus obligaciones y responsabilidades, guiado por su sentido del deber y justicia, tratando de ayudar a quienes lo necesitaban. A Jimin siempre le había parecido una cualidad sumamente atractiva en el carácter de su pareja.

          Sin embargo, ahora, después de haber experimentado el miedo a perderlo y haberlo visto cubierto de sangre e inconsciente, se replanteaba hasta qué punto esa virtud era peligrosa. Seúl, a pesar de aparentar ser una ciudad civilizada y desarrollada, estaba llena de una suciedad que se había ido barriendo bajo la alfombra durante años, en aras de promover una imagen de perfección. Era algo que ocurría en todos los ámbitos, incluso el de los negocios, desde siempre. Pero con criminales y armas de por medio, todo se sentía más crudo, real y peligroso que las usuales guerras verbales entre políticos y comerciantes.

          —¿Hay alguna forma de hacer que dejes de ponerte en peligro? —susurró al aire—. No quiero interponerme en tu pasión, pero tampoco quiero perderte.

          El tono del celular de Jungkook se escuchó desde el Estudio, donde lo había dejado antes de irse a dormir. Jimin lo alcanzó, debatiéndose entre llevárselo o no, preocupado por su descanso. El nombre de Namjoon parpadeaba en la pantalla. Probablemente no era una llamada que pudiese ser ignorada. Deslizó su dedo por el botón de contestar.

Mine to Hold ❀ 𝐣𝐤𝐦 ~ 𝔽𝕚𝕟𝕒𝕝𝕚𝕫𝕒𝕕𝕒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora