Situación: Matías y Bian se encontraban en la habitación de la fémina estudiando para los exámenes finales. Pero hubo un pequeño cambio de planes.
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- No puedo, voy a llorar -dijo Bian con la voz llena de frustración intentando resolver el problema de aritmética.
- Dale, no puede ser tan difícil. Déjame intentar -dijo Matias acercándose al centro de la cama donde se encontraba Bian con las piernas cruzadas.
- Ya lo intenté miles de veces, se me rompió el cuaderno de tanto borrar -se quejó mientras le pasaba el cuaderno a su novio.
- Upa, y con razón eh. Mirá, tenés que sumar de esta manera, si pones primero esa cantidad y la igualas con el total jamás vas a hallar x -exclamó Matías señalando con su lápiz el error.
Ambos se encontraban posicionados de tal manera que Bian podía apoyar su mentón en el hombro del contrario y así poder ver lo que este señalaba en el cuaderno.
- Oh, entonces creo que al hacer eso ya se puede pasar como raíz, y... luego sumar con esto, pasar como resta y HALLÉ X. -Bian soltó un gran grito de felicidad por hallar x.
- Mi oído boluda -dijo Matias agarrando su oreja.
- Perdón, fue la emoción. Gracias corazón, me salvaste. -le dio un beso en la mejilla a su novio como agradecimiento y siguió resolviendo los ejercicios en su cuaderno luego de quitárselo a Matias.
- Agradece bien flaca. -dijo Matías señalando sus labios con su dedo índice.
Bian lo miró con una sonrisa tímida, y se acercó lentamente sentándose frente a él, estando Matias apoyado en la cabecera de la cama.
Matias agarró el mentón de la contraria, acercándose a ella cada vez más. Delicadamente posó sus labios sobre ella, bajó su mano acariciando su cintura.
Bian apoyó sus manos en los muslos de su novio. El roce de labios aumentó su velocidad haciendo que ambos muevan sus cabezas de un lado a otro.
Se separaron por falta de aire, se miraron a los ojos y volvieron a juntar sus labios, Matias mordió el labio de Bian ocasionando que abriera la boca y el pueda introducir su lengua explorando la cavidad bucal de su novia.
Bian dirigió sus manos a la cabellera marrón de Matias jugando con sus cabellos de la nuca.
Matías tomó los muslos de Bian indicándole que suba a su regazo.
Siguieron así durante minutos, Matias frotando las manos en el cuerpo de su novia y ella acariciando el torso, espalda y hombros de él.
Se separaron quedando con los labios rojos e hinchados por aquella sesión de besos.
- Y bueno, eso sí fue un gracias mi amor -dijo Matias mirando a los ojos de la contraria. Bian soltó una pequeña risita como respuesta.
Carlos, el papá de Bian, se encontraba yendo a avisarles que ya estaba la comida- Nenes, bajen a almor- abrió la puerta y se detuvo abruptamente al ver a su hija en el regazo de Matias Recalt, su supuesto mejor amigo.
Lo demás es historia, ¿Matias Recalt sobrevivió? A ciencia cierta no se sabe.
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Creo que me acostumbré a subir cap cada 5 días. Espero que les guste, muak 🫶🏻
