Capítulo 216

164 30 2
                                    


"Lo siento."

Rafael se disculpó varias veces.

"Lo siento. Simplemente no puedo..."

"..."

"......No puedo parar."

"..."

"Lo siento."

Una disculpa que no estaba en su corazón, un sentimiento de autorreproche sobre el cual no podía hacer nada y aceptó que no tenía intención de dejar de hacerlo, llegó a sus oídos sin parar bajo la apariencia de una disculpa.

Hacía calor por todas partes. Era pesado. Estaba mojado y resbaladizo. Estaba aplastada de pies a cabeza. Una suave presión presionó y volvió a presionar.

La respiración agitada golpeaba constantemente sus oídos. Su tacto, su cintura, sus labios, ella no podía seguirlos. Ni siquiera podía recobrar el sentido.

Lo siento.

Lo siento.

Lo siento.

Porque le gusta tanto porque le gusta tanto...

Era ese tipo de noche. Fue una noche muy, muy larga.

***

Era de noche cuando Kanna abrió los ojos.

'Cuánto tiempo ha pasado....?'

Kanna parpadeó y luego se levantó. Luego se acostó de nuevo.

'Tengo sueño.'

Los brazos la tiraron por detrás. La llevaron obedientemente y le cerraron los ojos.

"¿Duermes?"

"Eh..."

"Por favor, continúa durmiendo".

"..."

Kanna estaba sorprendida. ¿Creciendo? ¿Creciendo?

Como siempre, Kanna le dio una palmada en el dorso de la mano cuando vio un movimiento desde atrás.

"Tú también duermes".

"No puedo dormir".

"Aun así, duerme. De verdad..."

"Lo siento."

"No te disculpes sin siquiera pensarlo".

Kanna volvió a darle una palmada en el dorso de la mano.

"Estuviste despierto todo el q

tiempo. Duerme un poco. Estoy cansado."

Kanna bostezó. Luego giró su cuerpo y enterró su rostro en su pecho.

'Tengo sueño.'

Aaaaq La mirada ardiente la miró fijamente en la oscuridad. Ojos de admiración, amor ardiente.

Susurró con voz ligeramente temblorosa.

"Kanna."

"¿Eh?"

"Eres hermoso."

Eres hermosa también.

Kanna quería decir eso, pero tenía demasiado sueño.

***

No fue hasta la mañana que Kanna finalmente recobró el sentido.

"Ten un poco de té."

Raphael le sirvió té mientras ella se sentaba en el sofá con el rostro desaliñado. Kanna lo miró sin comprender.

"..."

MI CUERPO HA SIDO POSEÍDO POR ALGUIENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora