MI CUERPO HA SIDO POSEÍDO POR ALGUIEN

Historia paralela Capítulo 17

<A Alex.>

Kanna dudó mientras sostenía la pluma estilográfica.

¿Qué debería decir ella? Hay tantas cosas que quiere decir...

<¿Estás bien?>

Ella termina usando el saludo obvio. Kanna se rió.

"Por supuesto que te irá bien".

Hace unos meses, Alessandro despertó de un largo sueño. Pero eso fue todo.

Alejandro no regresó. Eligió no volver...

Ese pequeño pueblo costero, eso es lo que queda.

"Necesito descansar."

Sí, por supuesto que lo es. Nadie en este mundo necesita descansar más desesperadamente que esa persona.

Entonces ella se fue. Porque su misma existencia debe ser una gran agonía para él.

'Quiero estar contigo, pero...'

Kanna sonrió amargamente y miró la carta.

Alessandro Addis, ese hombre tiene un secreto muy antiguo. Quizás pretendía ocultarlo por el resto de su vida. Ella habría creído que cuando todo terminara, su vida también terminaría.

Pero la vida continuó y sus secretos quedaron a la vista.

Así que ahora tenía que tomar una decisión.

¿Admitirá el secreto o lo enterrará para siempre?

Ella no sabe qué decisión tomar.

Pero tomará una decisión después del descanso. Iba a obedecer lo que fuera.

Por eso ahora se mantiene alejada. No se han visto ni una sola vez desde que se separaron en el pueblo costero. Simplemente siguen intercambiando cartas.

¿Cuándo podrá volver a verlo?

Sonido de golpe.

"¿Puedo entrar?"

Fue cuando.

TOC Toc.

Hubo un golpe en la puerta.

Antes de que pudiera oír la respuesta, abrió la puerta y entró.

"Si ese es el caso, ¿por qué llamas?"

Kanna dobló la carta y lo regañó.

"Qué golpe entre nosotros."

"¿Qué? Hay algo entre nosotros."

"Hay algo caliente e intenso.

"..."

¿Ese niño está loco? Kanna lo miró con desprecio.

"No existe tal cosa."

"Debe haberlo."

"No."

"Recuérdalo bien, Kanna. Debe haber algo."

"Cállate. Pervertido de bajo grado."

"Ya que sabes muy bien que soy un pervertido de bajo grado, ¿crees que me pasa algo?"

Orsini se rió entre dientes.

'Míralo. Bueno. Estoy muerto.'

Ella supone que hoy está de mejor humor, ya que hace bromas que no son típicas de los demás.

"Oye, muévete hacia un lado. Por favor, siéntate".

Orsini tocó a Kanna en el hombro y se apretó en el asiento junto a ella.