𝐒𝐚𝐝 𝐆𝐢𝐫𝐥 (𝑬𝒏𝒛𝒐 𝑽𝒐𝒈𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒄)

Chapter 5★

-Contame que pasaría si...-

Lo interrumpí ante de que terminara de hablar.

-Callate Mati si no quieres que te rompa lo que se llama cara, y más que la tuya es bonita- el chico bufo unos segundos y volteo a la cámara.

-Dale nena no puedes seguir ocultando lo que sientes por él-

-No lo oculto, solo ya sabes no sé puede enterar-

-¿Por qué?-

-Ponte a pensar Mati ¿Y si no le gustó?-

-De verdad que eres boluda, ¿Crees que si fuera así el te seguiría hablando?-

-A lo mejor me quiere como amistad-

-De verdad que tú si eres pelotuda ¿No piensas cierto? Creo que te tiraron cuando eras una bebé-

Meghan apareció a un lado de Mati y asintió confirmando lo que había dicho anteriormente Mati.

-Ni se te ocurra apoyarlo- la amenace a la pobre chica

-Solo diré que tiene razón, pero tiene razón-

-Cabrones-

-Tienes esa boca ¿Y así quieres besar al lindo de Enzo? Mal ahí cielo- hablo Mati

-Vayanse muy a la mierda los dos-

-¿Ves a lo que me refiero Meghan?- el chico volteo a ver a Meghan y la castaña asintió
Los dos me miraron de una manera ¿Decepcionada? A lo que solo reí.

-Dale nena, si no crees que le gustes entonces conquistalo-

-¿Qué?-

-Lo que escuchaste- hablo la castaña y Mati asintió

-Estan locos-

-Lo amas nena-

La puerta sonó y no sabía que decir me quedé muda por unos segundos.

-Hablando dé- rio Mati y me miró de una manera pícara.

-Ve por él, a y oye Meghan te mando algo por paquetería-

-Dale ahorita voy entonces- Mati sonrió y terminamos la llamada fui a la puerta y era Enzo traía una caja,el paso a la pequeña sala.

-abremelo-

-¿Las piernas?- pregunto de una manera muy seria no podía verlo estaba de espaldas

-No seas...- antes de que terminara la frase el me atrajo hacia él y empezó a reír

-Eres un estúpido- río de una manera divertida entre cierro un poco los ojos no quería mirarlo a los ojos sabía que estaba nerviosa y sabía que él también lo sentia.

-No te pongas nerviosa- susurró a mi oído, este hombre sabía lo que me hacía sentir en mi así que me puse mas nerviosa mis mejillas se pusieron de un color rojo que me hacía picar mis mejillas suspiré un poco.

-No seas... Ahg- me queje al sentir sus manos posarse en mi cintura de una manera que no sabía cómo responder me sentía tan nerviosa, mi piel se erizaba al igual que sentía una electricidad que no me hacía separarme de él a pesar de sentir que me estaba muriendo por la manera en la que estábamos.

-Dime algo por favor... No te quedes callada, es lo que te pido...- volvió a hablar las palabras no podrían salir de mi boca no sabía cómo responder. No podía ni alzar un poco mi cabeza por lo nerviosa que estaba por sentir mi cara arder de lo roja que me sentía por el contacto que sentía.
Le devolví el abrazo de una manera tierna e inocente. Mis brazos se enrollaron en su
cuerpo.