Prólogo

70 14 5
                                    

—Mi marido me ama tanto que me ha obsequiado esto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Mi marido me ama tanto que me ha obsequiado esto.— Presumio Rin con una gran sonrisa el anillo en su dedo, las demás se removieron en sus asientos fastidiadas.— Soy afortunada de tener por esposo al rey de Japón

—Solo el rey fue tan valiente.— Murmuro una de ellas pero Rin fue capaz de escucharla

—Me tienes envidia

—¿Perdón?

—Si, todas ustedes me tienen envidia porque sus esposos no les dan regalos como a mi, porque soy bonita y tengo demasiada suerte, ninguna podrá tener todo el oro que yo tengo

—Pues tanto oro ya te daño la cabeza.— Rodo los ojos otra de las mujeres.— Suenas tan falsa cariño, quizá el oro llena los huecos de tu alma

—Ja, seguramente todas sus joyas le hacen compañía en las noches.— Dijo burlona una a lo que todas rieron, Rin las miro con odio.— Hazle un favor a todas y muérete

—Le diré a Obito lo que ustedes están diciendo de mi

—Si, corre tras tu marido ya que no sabes defenderte de cosas que son ciertas, que te duelen maldita Nohara, solo sabes pedir regalos

—Esta mujer no sabe hacer nada, ¿Y enserio es reina de Japón?

—Lo único que sabe hacer bien es acostarse con el primer hombre que encuentre.— Todas rieron ante lo dicho y siguieron burlándose de la castaña que se levantó y marchó

— Todas rieron ante lo dicho y siguieron burlándose de la castaña que se levantó y marchó

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¡Las odio! ¡Las odio madre! ¡Malditas sean ellas y toda su descendencia! ¡Las odio!

—¡Ya porfavor Rin, cállate! Estar aquí con tu escena no soluciona nada, ¡Actua como la reina que eres! No te comportes como ellas.— Bufo irritada

—¡Me llamaron falsa! ¡Ellas debeñrían respetarme!

—Con la actitud que tomas cada vez que te provocan dudo mucho que te tengan respeto, no actúas como una mujer, actuas como una niña con ataques de berrinche.— Rin la miro molesta.— Tu mejor preocúpate por cuidar tu lugar aquí, no fue fácil conseguir todo esto como para que por un descuido tuyo todo se vaya al demonio

El Intercambio ➵ ObideiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora