La Casa Sureña (Lincoln x Harem, AU +18)

Luna (1) & Sam (1)

Luna, la tercera hija/hermana mayor del clan Loud, silva para sí misma mientras caminaba hacía la puerta de la casa de madera, vestida en un vestido floreado (definitivamente no apto para trabajo), sus botas buenas de cuero, y con su guitarra española en la espalda, llamando obviamente la atención de su padre -¿A donde tan bien vestida mija?- Lynn Loud Sr. preguntó rascándose un momento la cabeza, interrumpiendo el trayecto de su hija.

-Voy a tener una cita 'apá- La chica de cabello marrón aseguró con simplezas, colocando sus manos en sus caderas.

-¿Con quién?- Lynn Loud Sr. repitió tomado por sorpresa -Si se trata de ti y la hija del sheriff solas otra vez, quizás la gente del pueblo empiece a hablar- El hombre mencionó un poco preocupado, aunque pronto fue interrumpido.

-No te preocupes 'apá, es una cita con Linc, deberitas, o que me parta un rayo- Luna insistió y juró, levantando a su hermano menor antes de colocarlo debajo de su axila como equipaje liviano. Si, su excusa es que iba a tener una cita con su hermano...
-Hola 'apá- Lincoln saludó a su padre, ajustando su sombrero de vaquero un momento.

-Ah, está bien entonces mija.- Lynn Loud Sr. suspiró más tranquilo -Cuida de tu 'mana, Lincoln- El patriarca del clan Loud mencionó despidiéndose de sus hijos, mientras iba a centrarse en otros asuntos dentro de la casa, ahora que la mayoría del trabajo del día estaba hecho.

-Seguro 'apá- Lincoln respondió tranquilo y seguro con la confianza de su padre, mientras Luna y él se guiñaban los ojos mutuamente, antes de salir.

***

Técnicamente los hermanos Loud si están en una cita en las afueras del pueblo más cercano de las granjas, pero es una cita entre Luna, Lincoln & Sam (Samantha) Sharp - la hija del sheriff, y buena 'amiga' (más que amiga realmente) de la chica del clan Loud.

Sam y Luna se conocieron cuando Luna participó en un pequeño concierto en el bar local del pueblo, y empezaron a hablar mientras sus padres se emborrachaban. Ellas dos simplemente congeniaron demasiado bien.

Afortunadamente la mayoría de personas pueden hacer la vista gorda con el pequeño vaquero peliblanco junto con ellas.

-Muchas gracias de nuevo Linc'- Sam, vestida con una camisa azul a cuadros, pantalones vaqueros y botas de cuero, insiste mientras revolvía un instante el cabello de Lincoln.

-No hay de qué señorita Sharp- Lincoln insistió, pasándose un par de dedos por su enrojecida nariz un momento, el chico está un poco sonrojado-avergonzado por el cumplido.

-Oi, Sam, no empieces a ligar con mi hermano sin mi- Luna declaró juguetonamente, "marcando" un poco de territorio, mientras que Sam simplemente seguía con su mano en la espalda del chico peliblanco.

-Entonces acercate chica, que ni tu 'mano aquí o yo mordemos- Sam respondió ante el 'regaño' de su pareja, apretando un instante el bulto en la entrepierna de Lincoln.
-Ay, me sonrojas- Lincoln y Luna exclamaron sonrojados.

Sam giró los ojos mientras sonreía de lado, antes de bajar los pantalones de Lincoln. Después de un rato de cita, era momento del postre.
Sam no pudo evitar sonrojarse esta vez, mordiéndose el labio mientras veía el miembro erecto de Lincoln al aire - incluso contando que no es la primera vez que ella lo ve en vivo y en directo.

-¿Te comió la lengua el gato o algo Sam?- Luna se burló de la rubia, apretando con sus manos el trasero de Sam. Ambas chicas están 'abrazando' la polla del chico peliblanco con sus cuerpos (tras haberse quitado la ropa), y Lincoln definitivamente llega más allá de sus ombligos con centímetros de sobra.

-Oh, calláte- Sam repitió, antes de darle un beso a la chica de cabello marrón. Mientras el dúo de chicas intercambiaba saliva, fueron descendiendo hasta estar de rodillas, separadas por el miembro del chico peliblanco, sobre el cual pusieron sus bocas encima.

Lincoln no puede evitar gemir mientras Sam se encarga de la punta de su polla, y Luna desciende hasta la base, masajeando las bolas de su hermano menor, con notable maestría y experiencia. Luna no puede negar que le encanta el aroma & el pálpito del viril miembro de su hermano menor...
Sam no se queda atrás, empezando a usar ambas manos para tratar de conseguir la primera descarga de su 'noviecito', que comparte con Luna obviamente.

El par de chicas está un rato encargándose del 'instrumento' de Lincoln, lubricandolo como pueden con su propia saliva y acelerando el ritmo para conseguir que el chico peliblanco les de lo que ella quieren -Me aprendí un truquito por cierto~- Sam jadeó, su respiración pesada por culpa de la enorme verga de Lincoln.

La rubia colocó un momento su mano en la retaguardia de Lincoln...

-¡Ah-h!- Lincoln gimió, por reflejo moviendo sus caderas contra Sam con cierto miedo, repentinamente entrando más profundo en la boca de la chica. Eso sorprendió a Luna un momento, pero ella pudo ver en primera fila como la polla de Lincoln entra completamente dentro de la boca de Sam, formando un bulto en su garganta y palpitando, justo antes de llegar al climax.

Sam encuentra problemas para tragar todo, su boca llenándose con el espeso y caliente líquido de los testículos sin fondo del peliblanco, hasta que ella no puede más. La semilla de Lincoln desciende entonces desde la boca de Sam hasta su abdomen, pasando por sus pechos, dejando un riachuelo de color blanco.

-W-oah- Lincoln y Luna exclamaron al mismo tiempo, mientras que Sam recuperaba el aliento -Yo también quiero probar eso 'manito- La chica de cabello marrón insistió, tronando sus nudillos un momento, mientras que Lincoln tragó saliva.

-Oh dios- Lincoln exclamó preocupado, atrapado entre la excitada Luna, y Sam, que ya estaba recuperando el aliento para el siguiente round. Lincoln es incansable, pero las chicas y mujeres a su alrededor también son ninfómanas.

Después de otro instante de 'experimentación' exitoso...
Pronto Luna y Sam se tiraron encima de Lincoln, opacando su visión con sus pechos, mientras que limpiaban un poco del líquido seminal encima de este. Como Sam obtuvo el primer turno, ahora Luna se posicionó encima de la polla de Lincoln, mientras que Sam por su parte preparó al peliblanco, sobre cuyo rostro ella iba a sentarse...

***

-Muchas gracias de nuevo Linc'- Sam y Luna repitieron, dando cada una un beso al vaquero peliblanco, en los labios.

-No hay de qué- Lincoln aseguró, aunque pasando su propia mano por su trasero un instante, entre las risitas de las chicas. El par de Louds estaba dejando a Sam en casa, antes de volver a la suya obviamente.