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Por otro lado, Fang Can todavía estaba en la oficina de Jiang Mingxu. Ella estaba jugando con su teléfono y mirando la foto de la boda en la mesa con una sonrisa ambigua en los labios.

Jiang Mingxu acababa de recibir un mensaje de Song Wei en su teléfono. Sólo había dos palabras: 'Sálvame'.

Fang Can inmediatamente borró la notificación con habilidad y se sentó frente al escritorio como si nada hubiera pasado. Esperó atentamente a que terminara la reunión de Jiang Mingxu.

¿No en mi vida?

¿No acaba de llegar una oportunidad?

Las comisuras de los labios de Fang Can se curvaron en una sonrisa engreída.

En ese momento, finalmente hubo movimiento afuera de la puerta. Probablemente la reunión había terminado y había mucho ruido por parte de la gente.

Sin embargo, los pasos de Jiang Mingxu fueron como el reloj más preciso. Paso a paso, se separó muy claramente de las voces humanas.

Entonces, el pomo de la puerta giró y una figura esbelta empujó la puerta para abrirla y entró.

Los ojos de Fang Can se volvieron cada vez más brillantes, pero ella no se levantó para saludarlo. En cambio, continuó fingiendo concentrarse en el plan de negocios que tenía en la mano y solo miró a Jiang Mingxu por el rabillo del ojo.

Sólo cuando él se acercó, ella pareció darse cuenta de repente de él. Levantó la cabeza y reveló una brillante sonrisa.

"Aiya, estaba tan concentrado que no me di cuenta de que entrabas, Mingxu. ¿Se acabó la reunión? ¿Todo salió bien?

Jiang Mingxu no respondió y caminó directamente hacia el interior del escritorio de la oficina. "No apruebo el proyecto Moonlight Town. La selección del sitio no cumple con los requisitos originales para el desarrollo de un área escénica".

Fang Can suspiró con tristeza. "Mingxu, ¿por qué sigues así? Siempre pones una cara tan seria como si fuera sólo un negocio. Ya hace muchos años que no nos vemos. ¿No puedes hablar conmigo de los viejos tiempos? ¿O hablar con un poco más de tacto?

"Construir un resort sobre un antiguo vertedero. No creo que haya nada más que decir sobre tal propuesta".

Jiang Mingxu era frío, duro y distante. Incluso sin usar palabras. Era como un cuchillo afilado que podía herir a la gente.

Junto con su tono ligeramente burlón, era como si estuviera clavando un cuchillo en el corazón de las personas.

La mirada de Fang Can vaciló por un momento. En un tono suave y casi coqueto, dijo: "Entonces, ¿qué hay de mí? ¿No tienes nada que quieras decir? ¡Soy tu primer amor, después de todo!

Jiang Mingxu la ignoró directamente y continuó con su trabajo inacabado en la mano. "Si no hay nada más, lárgate".

Fang Can se mordió los labios y sus ojos ya estaban rojos. "Mingxu, sé que en aquel entonces, para cumplir mi sueño, me fui al extranjero cuando más necesitabas apoyo. Pero durante todos estos años, no pude olvidarte, y tampoco siempre fui capaz de iniciar una nueva relación..."

"..."

"Creo que tú también eres como yo. De lo contrario, ¿por qué te casarías con una mujer que se parece tanto a mí? ¡Simplemente la estás tratando como a mi sombra!

"Salir." La voz de Jiang Mingxu era fría y rígida, con un leve indicio de peligro.

"Solo admítelo. ¡Todavía me amas!"

Jiang Mingxu levantó la mano y presionó el botón de su teléfono fijo. Su asistente entró rápidamente. "Lo siento, señorita Fang. El horario de visitas del director Jiang ha terminado. Encuentre otro momento para programar una cita nuevamente".

Fang Can todavía parecía querer luchar y quedarse atrás, pero la orden del asistente de echarla ya era muy inflexible. Sería un poco insensible que ella se quedara aquí.

Así que recuperó su plan y se preparó para salir de la oficina con el asistente.

Al final, ella todavía se dio la vuelta y miró en dirección a Jiang Mingxu. Ella dijo de una manera particularmente seria y segura: "Tu silencio simplemente significa que tengo razón. Jiang Mingxu, ni siquiera me miras. ¡Te sientes culpable!

Sin embargo, ella todavía no recibió respuesta.

Jiang Mingxu ni siquiera le dio una mirada adicional.

Por otro lado...

Song Wei se sentó en el sillón rojo que Zhou Huiqian le había preparado y comió una suntuosa cena al estilo italiano.

La 'pequeña monada' que ella había cortado por la mitad también fue guisada en sopa de serpiente y servida.

Zhou Huiqian estaba realmente satisfecha con este juguete suyo, por lo que le permitió caminar libremente en esta casa. Mientras ella no tuviera miedo...

Esto se debía a que Zhou Huiqian tenía bastantes pasatiempos pervertidos. Cada habitación estaba decorada como una Casa del Terror. El tema era diferente, pero todos estaban llenos de sangre y masacre.

Song Wei entró aleatoriamente en dos habitaciones y perdió interés.

En realidad, no tenía miedo en absoluto, pero simplemente no estaba interesada en esos horrores sangrientos deliberadamente exagerados.

Después de la cena, una criada vino a informarle que esta noche habría una fiesta mensual para Zhou Huiqian. Fue muy loco y ella podía participar.

"¿Loco? ¿Por qué se llama loco? Song Wei prosiguió.

Sin embargo, la criada tartamudeó como si realmente no se atreviera a decirlo. "En cualquier caso, vendrán muchos personajes famosos y se confiscarán todas las herramientas de comunicación. No se puede permitir que el mundo exterior sepa lo más mínimo sobre esto... ese tipo de locura".

Exmarido ámameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora