Volver a amar [Bakugo x lectora]

Capítulo 3: café negro

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Habian pasado unas semanas, Bakugo se encontraba en su oficina terminando unos papeleos pendientes que habían quedado, observo el reloj en su muñeca para ver la hora, se levantó con pesar, ya era hora de salir a patrullar, salió de su oficina, una empleada de su agencia se acercó rápido a él cuando lo vio entrar a la cafetería, donde pensaba beber un cafe, Bakugo al verla frunció el ceño molesto e irritado.

Esa mujer era tan descarada, ni siquiera disimulaba sus estúpidas intenciones, ya había intentado seducir a algunos de sus amigos, pero en cuanto lo vio se enloqueció por el, no había un solo día en el que no lo molestará con sus insinuaciones o coqueteos baratos, eso lo molestaba demasiado, estaba al borde de despedirla o mandarla a volar con una explosión.

Shina: oh jefe! Viene por un... Café- dijo de forma descarada-

Bakugo: si, ahora no me molestes-

Shina: déjeme prepararle uno- se acercó aún más, haciendo notar y mostrar un poco más sus pechos frente a el.

Bakugo: tch ... Olvídalo... -Se giró asqueado de la mujer frente a el- haz algo útil y ponte a trabajar o lárgate de mí agencia -

Bakugo salió echando humos, cuando volviera de patrullar se iba a poner a ver si esa chica realmente era útil y la despediria dependiendo la circunstancia, comenzó su recorrido por los puntos fijos que tenía que vigilar, alerta a cualquier cosa, paso por el jardín de niños donde había visto y conocido al niño, ese pequeño que de alguna forma le recordaba a alguien.

Con una mirada seria observo el jardín, veía a cada niño salir de la mano con sus padres, camino unos metros y luego se detuvo, pero nunca vio al niño, quizá ya se abría ido o tal vez hubo un incoveniente y no pudo ir ese día, siguió su camino, cada vez estaba más vacío el lugar, dio vuelta en varias esquinas, estaba tan irritado por lo que pasó un rato antes en la agencia con esa molesta mujer, el solo quería tomar un café.

Paso por una cafetería, miro unos segundos el cartel con el nombre del local, se le hacía conocido, en donde lo había escuchado antes? No lo recordaba, no le dio más vueltas al asunto y entro, debí beber ese café o estaría de mal humor... Más de lo usual, abrió la puerta donde una campanilla sonó, entro y se sentó en una mesa frente a una gran ventana, una joven chica lo atendió, tomo el pedido y llevo la orden al mostrador a unos metros de el.

X: abuela, mire lo sé hice hoy en la escuela - grito un pequeño sentado en una silla alta frente al mostrador.

X2: que hermoso mí cielo, somos nosotras y tu tomando el te- dijo la señora mayor que se acerco al pequeño.

Bakugo escucho la corta conversación, iba a ignorarlo pero la voz emocionada de ese niño lo recordaba, se giró con disimulo y noto que efectivamente era el pequeño de hace un tiempo atras había salvado de ser secuestrado, el pequeño dibujaba emocionado, una vez se escucha la campanita de la puerta el pequeño se giró viendo a más clientes, cuando volvía su vista al dibujo vio al rubio, Bakugo lo vio también levanto su mano en forma de saludo.

Volvió la vista a la mesa, se preguntaba porque tardaban tanto con su café, pero por un lado entendió el porque, el local era pequeño y estaba repleto de gente al menos para ese lugar lo era, el pequeño con dificultad bajo de la silla alta y camino a la mesa del héroe explosivo con total emoción.

Shion: señor Dynamight! Si vino, como lo prometio!- feliz de verlo.

Bakugo: bueno la verdad...- se quedó en silencio al ver el brillo de entusiasmo del pequeño - si, así es enano, dije que vendría y aquí estoy - otra vez una mujer se acercó a Bakugo un poco apenada, pero está vez era ______.

_______: disculpe señor, podría decirme cuál era su pedido?-

Bakugo: un café negro, sin azúcar - Bakugo la miro notando que era la madre del niño.