Capitulo 2

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Confunciones

Finalmente después de un largo rato, la pastilla todavía hacia efecto en mi, no podía sentir el dolor, y estaba agradecida. no sabía que hora era.
Vi con horror que mi uniforme ya no estaba, en cambio traia un vestido color rojo
Me sentí tan sucia, nuevamente en mi entro mucha irá, ese maldito bastardo hizo lo que quiso.
Trate de safar mis manos de las sogas pero era inútil estaban muy bien atadas, al parecer era un experto en esto.
La tristeza me invadió solo pensaba en mi dulce hermana kanae debe de estar muy preocupada por mi.
Solo quería verla de nuevo.
Y como era de esperarse ese maldito enfermo volvió.
Esa maldita sonrisa me asquea.
Cómo un ser humano puede sonreír así después de haber cometido un crimen -
Se acercó a mi y me dio un beso en la frente. Es realmente asqueroso, deseo la muerte ahora mismo.

Cuando vi a mi shinobu chan, acostada deleitándome con ese vestido que hacia remarcar sus sensuales Curvas no pude evitar sonrojarme.
Me acerque a ella y le plante un dulce beso en su frente.
-buenos días, mi hermosa mariposa - dormiste bien- como está tu cabeza -¿sientes dolor?
Sonreía demasiado con cada palabra que decía.

Ese maldito jugaba conmigo, y no lo soportaba, pero si quería salir de aquí tenía que seguir con mi plan.
-si, dormí bien- gracias por calmar mi dolor-
El imbécil solo puso una cara de impresión podía ver cómo esos estupidos y raros ojos brillaban.
-shinobu chan-
mi bella dama me hacía sentir único, la miraba mientras jugaba con sus mechones pupuras.
-Agradezco tus cuidados - le sonreí a pesar de que no quería.
Y pude observar como se acercó a mi quería besarme, no se lo podía permitir
Puse de lado mi cabeza y le dije:
-do..dónde estoy- que es este lugar?-
El se notaba molesto ante mi reacción y se volvió a enderezar.
-si tratas de averiguar si estamos en la cuidad, es una pena decirte que no- al contrario estamos muy lejos- donde nadie nos pueda molestar.
Ella me miró muy disgustada.
-¿por que haces esto?- dime qué te hice- tratas de pedir dinero?
Nuevamente reí con gracia mi bella mariposa sin duda nunca me dejara de sacar sonrisas.
-oh shinobu ya te dije que soy yo el que más anhela tu felicidad- te quiero a mi lado- quiero que seas mi esposa, mi mujer. Y tener una bella familia.

Con cada palabra que el decía me daban ganas de vomitar no hay forma de que nada de esto funcione. Jamás sería la esposa de un hombre como el y mucho menos pensar en darle hijos.
-ya es hora de comer amada mía -
Me dijo para abandonar la habitación, trago una mesita y volvió a salir está vez tardando un par de minutos.
Volvió sosteníendo un plato y un vaso de agua.
-¿q..que es eso?-pregunte.
-es tu desayuno querida-
De nuevo se sentó alado de la cama y acercó el plato hacia mi pude visualizar que era un plato de sopa de verduras.
No podía negar el hambre, pues mi estómago comenzó a reaccionar.
Y disgustada acepte las cucharadas que el me ofrecía.
Era evidente por qué me daba sopa de verduras. Los secuestradores les dan esto a sus víctimas para que se mantengan delgados y no se puedan mover.
-¿te diste cuenta? -me pregunto.
Confundida lo vi a los ojos.
-sabes por qué te doy esto, ¿Verdad?- después de todo shinobu chan es una mujer muy inteligente, no por nada eras la mejor de tu clase.
Nuevamente entro en mi repulsión ¿Cómo sabía todo eso?era un maldito acosador, quería escupirle la sopa en la cara.
Pero tenía miedo a como reaccionaria. ¿Y si me golpeaba?
Me contuve y aceptaba sus cucharadas.
-e...es tan obvio, supongo -
-shinobu chan ya te dije que no te haré nada si cooperas conmigo-
Yo asenté con la cabeza, sin mostrar otra reacción.

-sabes, recuerdo la primera vez que nos vimos-

Lo volví a mirar incrédula.

-ese día nunca lo olvidare- fuiste un ángel mandado por el dios que nunca creí que existiera.- estoy agradecido amor.
Cuando estaba a punto de contestar le.
Se paró de golpe mirando su elegante reloj,
-mira la hora tengo que trabajar- te veré está tarde mi amor.
Se una buena chica- si!

Bese la mejilla de mi amada, y salí corriendo.
Ella trato de decirme algo pero con la prisa que tuve no la escuche.

El maldito se iba, y solo pude decirle:
Espera!! Las pastillas!
Pero no me escucho y salió.
Ahora temia que el dolor regresará. ¿Y si el tardaba!? Que es lo que haré.
Comencé a llorar de nuevo. Quiero volver a mi vida de antes.

Salí de mi casa rústica y subí a mi auto, y maneje hasta la cuidad, estaba tranquilo ya que mi amada mariposa no podía escapar. Aún asi me enfureció dejarla, queria estar a su lado.
Recibí una llamada de el señor muzan, conteste:
Ah, señor muzan! Dígame.-
-Dónde diablos estás Douma? -Has hecho el trabajo que te encargué? -Acabaste con ese maldito?-
-claro que si señor- lo traigo en la parte trasera de mi auto- jaja! No dejaba de retorserce. Fue tan divertido.
-bien, desaste de ese Maldito y de su familia -
Recogerás a kokushibo el te ayudara, y te dará nueva información.
-Bien-
Suspiré profundamente- el señor muzan es un señor muy aburrido y amargado.
Tarde unas horas para entrar a la cuidad y recoger al señor kokushibo.
Finalmente llego al punto de encuentro y el entra en mi auto
Y me da la información.
-tienes que deshacerte de la esposa del político - y su hijo- el señor muzan dijo que le quitarás los órganos. Hará un buen negocio.-
-aah, que increíble - finalmente las cosas se pusieron divertidas, pero debo negarme señor kokushibo.-
-que dices Douma? Es una orden del señor muzan!-
-y aún que fuera una orden del mismísimo diablo, no lo haré. Mi ética me impide dañar a niños.-
-Qué clase de estupidez es esa?- en este negocio no existe la ética-
-lo se señor kokushibo soy yo el que más disfruto de este negocio pero sigo firme en esa decisión-
Kokushibo me miraba con una cara de disgusto
-¿y que piensas hacer ?-
-facil! Exclame con una sonrisa.- lo dejaremos en un orfanato-
-¿eres imbécil no?-
-Vamos señor kokushibo es un plan brillante!- y si no quita la amargura de su rostro se volverá como una pasa.-
Sonreí bastante, el solo me veía con pena.
Finalmente llegamos al objetivo y bajamos del auto tomando algunas armas y entramos ala casa.
Había una mujer de pelo largo y ojos color verde esmeralda, era una mujer hermosa.
Pero nada se comparaba a la belleza de mi prometida.
Ella corrió hasta la salida pero kokushibo la golpeó
La sangre emanaba con fuerza de su nariz
Era un deleite,
-buscare al mocoso- me dijo kokushibo- mata a esta perra-
El señor kokushibo entro más a la casa.

Mire a la mujer- y me incline hacia ella - oye sabías que tu esposo fue maldito miserable- hubieras visto como se retorcía de dolor cuando lo torturaba.
Ella me miró con horror y despues me dijo:
-p..por favor no me mates .....no le hagan daño a mi hijo- ayudaré en lo que me pidan-
Por favor!!-
Yo veía con pena a la mujer- que tan estúpida tienes que ser para suplicar por lo imposible. Era un hecho que acabaríamos con ella.
Le sonríe tiernamente y ella puso una cara de esperanza- era una mujer tan estúpida.
Sin pensarlo con rapidez le dispare en la cabeza.
El cuerpo cayó bruscamente para dejar rastros de sangre.
-¡¡MAMÁ!!!-
Voltie rápido y vi a un niño de 12 años con mismos ojos que la mujer incluso llegué a pensar que era una niña si no fuera por su aguda voz.
Y antes de poder llegar a mi kokushibo le dispararon quedando tumbado en el suelo.
Manchando un poco mi traje.
-espera kokushibo, dijimos que lo dejaríamos vivir-
-Que yo recuerde jamas accedí a esa idea tan estúpida -
-Pero era un niño -
Ya cállate no quiero oír tus lloriqueos-
-Llama a gyutaro a qué limpie este desastre.
Mire el cuerpo de la mujer, y si algo me fascinaba más, era comer carne de mujer bellas.
Cargue el cuerpo hasta mi hombro.
-¿que haces?- me preguntó kokushibo confundido.
-no es obvio, me la voy a llevar haré un festín con ella-
-haz lo que quieras.
Y finalmente salimos de la casa.
Solo contaba las horas para estar de nuevo con mi mariposa.



























Continuará .......

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