Tú y Uzui se conocían de vista, ya que tu frecuentemente ibas a su bar en compañía de tus amigos y amigas de trabajo una de esas salidas te pasaste de copas y pues... Te quedaste dormida en el bar... Pero todo eso fue plan de Shinobu tu mejor amiga y cómplice de tus bromas e fechorías.
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>Ahogado las penas<
Narrador omnisciente
Hoy era un día demasiado normal en cierta forma, ya que cuando te despertaste sabias que no estabas en tu casa. Así que entrastes en pánico y con tu mirada inspeccionaste la habitación en la que estabas, te levantaste de la cama con cautela y sales de la habitación sin antes voltear a los lados para ver si alguien estaba, como no vistes a nadie seguiste tu camino escaleras abajo. Al oír una voz masculina proveniente de la sala de estar te quedas inmóvil al ver a un hombre alto, musculoso, con cabello color blanco atado en una coleta, te acercas con paso lento y sigiloso mientras lo ves hablar por teléfono, por accidente te estrellas con un mueble haciendo que las cosas que tiene se muevan y hagan ruido haciendo que se percate de tu presencia.
- Te marco luego - dijo el de cabello albino mientras colgaba y se voltea a verte -
Se miran fijamente a los ojos, mientras te ve con el semblante serio pero sereno, tus ojos y los de él se mezclaron en una mirada llena de curiosidad y asombro por tu parte. Los ojos color violeta del hombre te tenían cautivada, los ojos violeta con un poco de carmin, son tan hermosos que ligeramente abriste la boca.
- Buenos días... - dijo para sacarte de tus pensamientos y empezar a caminar hacia ti, cortando sus distancia que tenían - si buscas tu celular esta en la cocina... Lo puse a cargar, te estuvo llamando un tal Giyuu, Tsutako, Iguro, Mitsuri y Himejima - dijo para empezar a caminar hacia la cocina y servir café en dos tazas -.
- ¿Eh?, gracias... - dijiste para ir a la cocina y agarrar tu celular y ver cuantas llamadas tenias -
Al revisar te nias más de 50 llamadas perdidas por parte de tu hermano Giyuu y tu hermana Tsutako, las demás eran de tu mejor amigo Iguro y tu mejor amiga Mitsuri y por último era la persona que la veías como un padre Himejima pero de él tenias menos llamadas, sabias que contesto la llamada de Himejima y le explico lo sucedido qué al tu no recuerdas del todo, empezaste a mandar mensajes a cada uno de ellos para que no se preocupen demás. Uzui te dio la taza de café y te sonrió.
- Gracias... - agarraste la taza y le distes un sorbo para luego sonreír - sabe delicioso...
- Es bueno que te guste mi café jajaja, al parecer tienes a mucha gente que se preocupa por ti - dijo viendo tu celular como empezó a sonar por la llamada de tus dos hermanos y por varios mensajes por parte de tus mejores amigos -
