01🌔

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El SONIDO DE UNOS Tacones era lo que se escuchaba en todo el pasillo, una cabellera blanca se movía al par de su caminata, unos ojos azules que mostraban tan preocupados y exaltados, gritos preocupados de una mucama y un mayordomo hacia la pelibla...

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El SONIDO DE UNOS Tacones era lo que se escuchaba en todo el pasillo, una cabellera blanca se movía al par de su caminata, unos ojos azules que mostraban tan preocupados y exaltados, gritos preocupados de una mucama y un mayordomo hacia la peliblanca era lo que se oían aparte, estos eran ignorados por la mujer que solo quería llegar lo más rápido que podía a la sala de trono en la cual le informaron que se encontraba su adorado padre.

Una vez en la entrada de dichosa sala, detuvo su andar para poder acomodarse su traje uno blanco que iba casi para el gris, con bordados dorados, cuando termino con su traje prosiguió con su cabello, un cabello blanco como la nieve, una vez ya lista tomo la compostura correcta, esperando así a su dama de compañía y a su fiel mayordomo quienes también se habían arreglado tanto las prendas como su físico.

Cuando ya estuvieron listos los tres la oji-Azul le dio una señal de que ya estaba lista al guardia que custodiaba la puerta de la sala, cuando estas se abrieron todo lo que pasaba adentro quedo en silencio todos esperaban a que la persona que interrumpió la escena que tenía el emperador con su segunda hija, pero al escuchar al guardia anunciar a la Primera princesa todos se quedaron viendo a las grandes puertas que fueron abiertas anteriormente.

- ¡Amaris de Secramise, La Primera única gran princesa de Arbezela!, ¡Ha llegado! - Después de aquella presentación la joven empezó a caminar siendo seguida por su dama y su mayordomo, en el transcurso de su caminata solo podía oír los halagos y susurros de los nobles presentes, logrando sacarle una pequeña sonrisa.

-"Vaya, la princesa Amaris están linda"- hablo uno de los nobles.

-"Sin duda"/"Ella están bella como la emperatriz misma"- Halagaron dos de ellos

-"Yo escuche que ella es mejor que sus hermanos, tanto en educación como en combate"- Dijo otro

Al escuchar lo último se rio internamente, sabiendo que era verdad sus padres y sus maestros se lo hacian saber siempre, ya que ella empezó con su educación con tan solo 4 años, aprendió rápido que ya nadie sabía que enseñarle mientras que a ella no le importaba repetir sus lecciones, gracias a eso desde pequeña y a media que fue creciendo pudo ayudar a sus padres con su papeleo sobre el impero para que no cargaran tanto pero claro, siendo hazi que se ganó el amor y el aprecio de todos.

Cuando llego donde estaba su padre junto a su hermana menor quien recibía una serie muestras cariño del mayor, pero estas pararon cuando el peligris la vio cambiando su semblante por uno serio.

-Su majestad, el sol radiante del Gran Imperio de Arbezela, Yo la Única gran princesa Amaris de Secramise le doy mis más grandes felicitaciones por su victoria recién- Como si su presencia no fuera bastante cuando hablo hizo que los nobles se sonrojaran y cuando termino todos veían al emperador esperando a que hiciera algo o hablara.

...

-¡Ah, Amaris, mi hermoso eclipse!- Al decir el nombre de la recién llegada hizo aun lada a la oji-violeta quien miraba estupefacta a su padre quien no dejaba de llenar de mimos a su hermana mayor, todos al ver el gran favoritismo que el emperador le tenía a la recién llegada .

𝐄𝐜𝐥𝐢𝐩𝐬𝐞 •|🌑|• 𝐿𝑎𝑠 𝐽𝑜𝑦𝑎𝑠 𝐷𝑒 𝐿𝑎 𝑃𝑟𝑖𝑛𝑐𝑒𝑠𝑎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora