Caminó en puntillas, un ruido fuerte y su sorpresa estaba arruinada, piso con cuidado las maderas del piso, evitando las que sonaban y las que podían hacerlo trastabillar.
Tenían una misión súper importante y no podían fallar, no esa mañana.
El cachorro detrás de él se llevó las manos a la boca, acallando una risita, Beomgyu sonrió llevándose el dedo a la boca, haciéndolo callar, el pequeño se tapó la boca, riéndose, aun así.
Abrió la puerta frente a él, empujándola con cuidado para que no haga ese chirrido que hacía cuando la abrían de pronto, ya se habían acostumbrado, pero podría arruinar su sorpresa.
— Okey, a la 1... A las 2 y... ¡A las 3! — contó con los dedos, dándole luz verde al cachorro para comenzar su parte de la sorpresa.
El cachorro corrió a la cama, saltando sobre el alfa dormido y comenzando su cantito de cumpleaños con mucho entusiasmo.
Beomgyu prendió las luces del cuarto y sopló la corneta que había comprado especialmente para ese momento.
— ¡Que los cumplas feliz, que los cumplas feliz, que los cumplas feliz, papi! ¡Que los cumplas feliz! — canturreó aplaudiendo encima del bulto que era Taehyun.
Dejó el desayuno por el cual había madrugado en un lugar seguro, sonriendo alegre ante la cara de dormido de su alfa cumpleañero.
— Hey, gracias cariño, muchas gracias — el alfa abrazó a su cachorro riéndose.
Aprovechó para unirse al abrazo, siendo cuidadoso al arrojarse y siendo capturado en el abrazo de su alfa.
— Buen día, amor, feliz cumpleaños — dijo, besando sus labios.
Nunca había visto a Taehyun sonreír así, sus ojos azules adormilados brillaban como nunca lo habían hecho. Beomgyu se enamoraba cada día más de él.
— Ohhh, gracias, mis vidas — los apretó en el abrazo, besando sus mejillas.
Kai le devolvió el beso en la mejilla, abrazando la cabeza de Taehyun tiernamente.
El cachorro estaba muy contento por el cumpleaños de su papá, se había emocionado cuando el día anterior Beomgyu le había explicado y lo que planeaba hacer, de inmediato se puso a hacer un regalo para su papá que ahora estaba en la bandeja de desayuno que le esperaba.
— Nada de gracias, gracias a ti por existir y ser tan tú, eres el mejor — dijo sonriendo, muy feliz de estar allí con su alfa.
Era el cumpleaños de su alfa, de su novio, del papá de sus hijos y el compañero con quién Beomgyu quería pasar el resto de sus días, era su superhéroe sin capa que se cruzó en su vida cuando más lo necesito y se volvió su pilar, Beomgyu tenía sus razones para estar tan emocionado por su cumpleaños.
— Van a hacer que llore, los amo mucho mis amores — dijo con su voz realmente gangosa.
Beomgyu besó su mejilla otra vez, disfrutando mimar a su alfa bonito y sentimental.
— Oh, está bien, puedes llorar, papi, hace bien al corazón — dijo Kai asintiendo sabiamente, sus padres no pudieron evitar reír.
Compartieron el desayuno en la cama, cantando la canción de cumpleaños una vez más mientras Taehyun soplaba las velas de su pequeña torta de panqueques, siendo una pequeña fiesta de cumpleaños íntima entre los tres.
O cuatro.
Porque había que contar a Pelusa, que apenas sintió ruido corrió a la cama, asaltando también al cumpleañero y lamiendo su cara.
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•| Beach boys |• © Taegyu •
FanfictionBeomgyu sabía solo dos cosas del papá de su bebé, que se llamaba Taehyun y que era el alfa más caliente que un omega soltero de 21 años podría haberse cruzado en una noche de verano. O dónde el omega de 24 años y su cachorro comienzan de cero en un...