No me eres útil

Busca A Tu Alfa

Itachi no dejó tiempo a que Naruto buscara una excusa o saliera huyendo, simplemente su instinto de alfa fue de proteger al pequeño omega, se acercó al rubio y lo abrazó.

Naruto se iba alejar, pero al sentir la calidez del abrazo de Itachi, solo pudo corresponder.

Itachi sintió las lágrimas silenciosas del rubio mojar su ropa y solo lo dejó estar, no hizo preguntas ni nada, solo le abrazó.

Luego de un rato Naruto se calmó.

-Ahh yo.. Lo siento_ se sintió apenado sin levantar la cara aún.

-Te llevaré a casa_ dijo Itachi y sin esperar repuesta salió por una puerta más escondida del lugar y llevó a Naruto a su auto.

-Te sientes mejor? _ preguntó al rubio que ahora estaba sentado en el asiento de copiloto.

-hm_Naruto solo asintió con un sonido.

Itachi se acercó un poco y le levantó el rostro hacia él con el dedo indice, con la otra mano le limpió las lágrimas con su pañuelo__-Un omega tan bonito no debería llorar así_dijo el mayor poniendo una sonrisa amable.

Naruto sonrió ante lo dicho por el mayor.

-Sabes, se me antoja algo dulce justo ahora, y a ti? _ Preguntó para animar al chico

-Quiero ramen_ respondió Naruto

Itachi sonrió al ver que el rubio estaba mejor y condujo hasta una tienda de ramen que el rubio conocía muy bien.

-Wow, Ichiraku Ramen, hace mucho no venía por aquí.

-Enserio? Recuerdo que cuando les traía a ti y Sasuke a este lugar no se insultaban, era la única comida que podían compartir sin odiarse.

-No me recuerdes a Sasuke, me arruinara el apetito_ se quejó el rubio poniendo un puchero.

-Ja jajá_ Itachi se río al ver el gesto del omega_ bien, bien, vamos, pide tu ramen, pero no me dejes sin efectivo ando pobre esta noche.

-Andas un auto será suficiente pago dijo riendo el rubio, y se dirigió felizmente a pedir aquella comida que sus padres le prohibían, su amado miso ramen con extra carne de puerco.

Luego de 6 platos de ramen el rubio se limpió delicadamente la boca con una servilleta, como todo omega decente.

Itachi vio al rubio, limpiarse la boca pensando que, aunque parecía mucho, en realidad el rubio solo estaba siendo educado, porque podía comer más que eso.

Un día que Naruto había peleado con Sasuke y había salido corriendo, él ayudó a buscarlo con un Sasuke de la mano que se sentía arrepentido, aunque no lo expresara mucho.

Cuando encontraron al rubio, entraron a ese lugar ya que los dos niños tenían hambre, fue la primera vez que comieron ahí, Itachi no andaba mucho dinero consigo ya que solo habían salido a buscar a Naruto, dió todo el dinero que andaba y volvieron caminando, la mansión Uchiha no estaba tan lejos de ahí.

-Itachi, iremos por tus dangos? _ preguntó Naruto sacándole de aquel recuerdo.

-Sí, vamos.

Naruto degustaba con felicidad su primer dango, mientras Itachi ya iba por el quinto palillo de dangos

Si la debilidad de Naruto era el ramen la de Itachi eran los dangos.

Finalmente Itachi dejó a Naruto en la entrada de la mansión Namikaze.

-Muchas Gracias Ita-san _agradeció con una sonrisa el omega.

-Es un gusto haberte acompañado Naruto-kun.