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—Otra vez aquí —Susurro el portador de alto grado del agua.

—Tal vez por qué Mitsuri nos obligo, y no querés saber lo que pasa si la hacemos llorar —Responde el usuario del viento, percibiendo la mirada de la prometida pelo rosa. —Ademas es parte de su “investigacion” que... Para nada me importa. —Gruño lo último.

—Bueno los cite aquí, —Termino la pelirosa, mirando a ambos de la pequeña sala. —Para saber los testimonios de ti Giyu —Apuntando con el dedo índice al pelo azabache.

—¿¡Y por qué me trajiste aquí?! —Antes de seguir encarar, sintió de nuevo la mirada del usuario de serpiente. —Mejor me callo —Susurro

—Te traje aquí porque eres el más cercano a el —El albino gruño — Giyu Tomioka, eres la más cercana a ella y por eso quería preguntarle que— Antes de poder seguir sintió como su prometido golpea la mesa y se levanta.

— Shinobu está casada, si, pero no es del cuerpo de exterminio de demonios. —Sanemi abrió la boca a tal punto de chocar con el piso, Tomioka gruño y Mitsuri se quedó callada. — Deja de molestar a tus compañeros y —

—¡POR QUE NO ME LO DIJISTE IGURO OBANAI! —Exalto la pelirosa que sin creerlo, lo escucho el mismísimo Muzan.

—Bueno chicos yo me voy. —Conto calmado al llamado saliendo corriendo por su vida, siendo seguido por la pelirosa.

El silencio rindió en la habitación, sin ninguno de los dos abrió la boca para intercambiar palabras.

—Tu... ¿Tu lo sabías verdad Tomioka? —Pregunto el albino al azabache, este mismo trago fuerte.

—Si, yo la ayude a ocultarlo —Sanemi se volteo y salió de la habitación. — Para que hable —Susurro y también salió de la habitación.




















—¿Lo tienes amor? —Pregunto la de broche de mariposa.

—Claro que lo tengo, ¿por qué la pregunta? —Hablo una voz suave y calidad, Shinobu apreciaba a su marido de arriba a abajo, tenía una confección delgada y piel bronceada, su cabello era un hermoso rojo vino que se acompañaba con una coleta que le llegaba a media espalda, su cicatriz en su parte derecha arriba, sus ojos rojos vino y sus preciados labios que reclamaba todos los días la volvía loca en todo los sentidos.

—Por nada pero antes de ir, déjame reclamar lo que es mío. —Acerco sus labios y hizo conexión a los labios ajenas, un beso lento pero recalcaba el amor del joven matrimonio. —Ahora si, vamos —Se separó del beso viendo un lindo puente de ambas saliva. Empezaron a caminar hacia la finca General para dar una noticia.

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Perdón por la demora al subir este cap, se que es corto y todo es por qué no tengo mucho tiempo, con mis vacaciones en zonas sin conexión y mi aprendizaje de programacion etc. Pero bueno sigo aqui y seguiré subiendo.

:)

Una muestra de mi futuro trabajo

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Una muestra de mi futuro trabajo

¡¿El Esposo de Shinobu?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora