Memories de una vida (FreenBecky)

Fantasía en una realidad

"Rahp"

Agosto, 21
Año 2023

Afuera, el clima era agradable, las personas pasaban riendo y podía observar a algunos chicos patinar.

Podía ver todo a través de este cristal, lo que parece ser un buen lugar para sentarse y beber café helado mientras esperaba al amor de mi vida.

Podía ver cómo el viento movía el cabello de las personas o cómo los niños jugaban con las palomas, realmente agradable.

Tres semanas.

Son tres semanas desde que mi novia tomó aquella decisión.

No lo culpo, no podemos decidir quién amará o no.

Puedes amar con todo tu ser hasta morir, y es posible que esta persona no lo haga, y te preguntas: ¿Hice todo mal?

Hay muchas maneras de dedicar y obtener amor y hay muchas formas de morir o vivir, pero por alguna razón, me toca la parte mala de la fruta.

Escuché el pequeño sonido de aquella campana, que anunciaba que alguien acaba de entrar.

Mi vista se fue a la puerta como si de un robo se tratase.

Su cabello suelto se movió hacia la izquierda y a la derecha en todos los pasos que hizo, pero sus ojos parecían estar buscando algo.

Parece que el tiempo no ha pasado, irradia como siempre, aparentemente se ha vuelto más delgada, pero sigue siendo tan hermosa como la luna y tan radiante como el sol.

Ella era mía y no podría olvidar eso.

Alcé mi mano un poco para llamar su atención, nuestros ojos se cruzaron y una pequeña sonrisa se cruzó en mis labios.

- Hola - dice llegando a la mesa y luego se sienta. - Disculpa, me retrasé un poco, recién salgo del trabajo.

Se excusa con algo de pena.

Mi corazón saltó de emoción al ver cómo sus mejillas se sonrojaban un poco.

- No te preocupes - respondí y luego tomé un poco de café - ¿Quieres pedir algo?

- No, gracias - asentí suavemente.

Se movió en su asiento, un poco incómoda; aparentemente, ver a su ex no era normal.

- Si no te sientes bien, puedes irte, - dije con calma. - Realmente no sé en qué estaba pensando cuando te di esta sugerencia. - Soy honesta.

- Tú lo pediste, y siento que te lo debo, por alguna extraña razón siento que debería estar aquí - respondió con calma y sonrió.

Al terminar de decir aquello, mi corazón dolió.

Saqué suavemente este artículo de mi bolso y lo coloqué con cuidado sobre la mesa.

Sus ojos permanecieron allí durante unos segundos.

Lo sostuvo en sus manos y lo analizó, tratando de descifrar la situación, mientras yo la observaba en silencio.

Nunca pensé que me dolería tanto cuando sus ojos me miraron de esa forma.

- Rahp - dije sacándola de su trance - ¿Recuerdas cómo te lo di? - mi voz suena un poco entrecortada, pero trato de ocultarlo.

Niega.

...