Vida inherente

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"Identificador"

Enero, 31
Año 2024

Las altas temperaturas han persistido durante los últimos días y es probable que continúen durante los próximos dos meses.

Hoy decidí esperar dentro nuevamente, faltaban algunos minutos para verla llegar.

Recientemente pensé en ir a la playa, pero lo pospuse porque quería invitarla.

Sabía que estaba trabajando tan duro, así que no lo hice por esto.

La recuerdo diciendo que nuestro lugar feliz sería estar juntas para siempre en la playa, y yo pensé lo mismo por un tiempo hasta que descubrí que mi verdadera felicidad estaba justo a su lado.

"Tu chica viste realmente sexy hoy"

El mensaje de Irene me advirtió sobre su llegada.

Sonreí cuando la vi entrando al lugar y mirando con aquellos hermosos ojos a mi dirección.

Irene no se había equivocado.

Ella es la mujer más bella y sexy del mundo (y siempre lo ha sido).

No sabía que había contenido la respiración si no hasta este momento.

- ¿Agua? - pregunta al ver mi vaso en la mesa.

- Esperaba por ti para pedir juntas - respondí con honestidad.

Mostró un poco de sorpresa y, a la misma vez, ternura.

Sonrió y sacudió la cabeza, levantó la mano y llamó al camarero.

- ¿Freen? - dijo sacándome de mis pensamientos - ¿Quieres algo?

- Oh, si -  miré rápidamente el menú - El té helado estaría bien, gracias - el camarero tomó la orden y se fue.

Mientras la observaba, vi que se había cortado un poco el cabello y que aún seguía llevando el anillo de promesa.

Saqué una pequeña tarjeta de mi bolso y la puse sobre la mesa.

Su primera impresión fue de total confusión, pero una sonrisa se dibujó en sus labios cuando leyó mi nombre.




...

Año 2017

Mayo


La hora del almuerzo había llegado y con ello, los estudiantes también.

La cafetería de la universidad se llenaba tanto que algunas veces prefería llevar mi propio almuerzo y comerlo fuera del recinto.

Las multitudes me disgustaban.

Por lo tanto, cerca de la hora del almuerzo, tomaba el banco que se encontraba fuera de la cancha de tenis y me sentaba allí, sola.

Ese era mi lugar.

No importaba cuánto sol hiciera, había un árbol que cubría el lugar por completo.

Algunas veces estudiaba allí mismo antes de algún examen y otra, simplemente estaba allí.

Los chicos que practicaban este deporte lo hacían durante la hora del almuerzo, así que algunas veces solo los observaba.

- Parece que nos gusta el mismo chico - dice una mujer detrás de mí.

Me atraganté con la comida, no esperaba que alguien estuviese aquí, ni mucho menos esperaba escuchar aquellas palabras.

Memories de una vida (FreenBecky)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora