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          —Una fantasma, una banshee, un chupacabras y ... ¿una sucubo? — Los cuatro están sentados en un parque; Abbi furquien los reunió ahí, buscándolos con la duda de que tal vez era la única con el problema de que las pastillas no funcionaron.

          —Es mejor que Jill Nye— La científica contesta resignada, tal vez a que no se salvará de los apodos de Tilda, tal vez acerca de la situación que enfrentan.

          —Una fantasma, una banshee, un chupacabras y una sucubo se encuentran en un parque— Tilda dice antes de beber un trago del licor que lleva, Gina suele criticar al tipo de persona que bebe a estas horas del día en medio de lugares públicos, pero en esta situación casi quisiera tener su propia botella de licor.

          —¿Cuál es el chiste?— 

          —Creo que nosotros lo somos— Tilda le contesta a Juan como si fuera obvio.

          —No creo que me quede lo de fantasma— La castaña dice mientras cambia su lugar, ahora abrazando una de sus piernas, su cabeza descansando contra su rodilla —Los fantasmas pueden poseer gente, desaparecen completamente, no hago ninguna de las dos—

          —¿Segura que no puedes?— Juan le pregunta casi de inmediato, Gina posa su mirada en el menos de un segundo y asiente.

          —A menos que sea amnesica estoy cien por ciento segura que ninguna de esas cosas ha pasado— Gina suspira, espera que ninguna de las dos cosas suceda, serían cosas que no podría controlar —¿Creen que esto sea un accidente o que haya sido planeado?— Lo dice pensando en la señora que se encontraron ese día en la clínica, la mujer les decía que huyeran, Gina ahora piensa que tal vez ella sabía lo que estaba por pasar.

          —No creo que Doctor Sarkov haya hecho esto a proposito, estoy segura que hay una explicacion y tenemos que ir a que nos la de— Después de que Abbi habla todos se levantan, listos para ir a la clínica a buscar respuestas.

          Gina maldice levemente cuando no logra recoger su bolsa de la banca, sus manos una vez más traslucidas, los otros tres están avanzando y ella sigue ahí por que no esta tan desesperada por ir como para dejar sus cosas abandonadas ahí, al menos los demás notan como no los está siguiendo y poco después de que Juan note como sus manos no son visibles lo tiene a su lado cargando su bolso.

          Caminan lado a lado hacia la clinica, Tilda y Abbi por delante de ellos, están hablando de algo que Gina no alcanza a escuchar, si quisiera lo haría pero su mente no está concentrada en lo que pasa en este momento, está muy lejos, hundida en la posibilidad de estar así para siempre, incapaz de hacer cualquier cosa, necesitando la ayuda de alguien más eternamente, ¿Qué pasaría si esto fuera solo el inicio? Primero serían sus manos y poco a poco sería tod-.

          —Hey— Es Juan quien evita que sus pensamientos sigan vagando, su voz es baja y su tono es raro, uno que Gina no sabe que significa, pero la simple palabra logra que su atención fuera directo a él.

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⏰ Última actualización: Feb 10 ⏰

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phantom |  juan ruiz; the imperfects Donde viven las historias. Descúbrelo ahora