oncemil

106 7 0
                                    

-No me gusta herir a quien amo
No me gusta traer el pasado aquí, al presente
No me gusta sentirme ausente

-Cuando tú vives a mi lado

-No me gusta matar las horas
Sonreír si no soy feliz, convertirme tan solo
En un fantasma amante de todos

-Partido en once mil pedazos
Callándole la voz del alma a los dos
Asumiéndome un caso perdido



London Fashion Week

Bajé del avión lo más rápido que pude y me subí en el primer taxi que encontré hacia el departamento de Zayn.

Al llegar estaba algo nervioso, mis manos empezaban a sudar y no sabía como sacar las palabras.
Saludé al guardia del edificio que ya me conocía por las repetidas veces que veníamos a la casa del cantante, así que me dejó pasar y le agradecí.

Entré al elevador, dudando si presionar el botón del piso donde se encontraba mi novia era una buena idea.

Me convencí a mi mismo de que era lo mejor, no solo para mi, si no para los dos.
Presioné el número seis y la puerta se cerró, dejándome solo con un montón de pensamientos mezclados.

Toqué el timbre y el británico no tardo en llegar hacia la puerta. Al verme me recibió con un cálido abrazo y me hizo pasar.

Julie se aproximó a la sala de estar y corrió para abrazarme.

-Pensé que no podías venir - comentó mirándome con una sonrisa.

-El equipo me dio unos días libres, así que estoy aquí - contesté con una sonrisa triste

Ella se acercó para tomar mis mejillas y dejar un beso casto en mis labios.

¿Acaso este sería el último?

-Estas listo para la fiesta de Vittoria? preguntó Zayn a el piloto

-Claro que si

-No es una fiesta, dijo que era una cena tranqui en su casa - contestó Juliette

-Entonces Harry me mintió- añadió el cantante indignado

-Para Harry cualquier cosa que tenga alcohol es fiesta - dijo Leclerc riendo




-Estas bien amore? - preguntó Juliette

-Si, solo estoy algo cansado del vuelo- contestó con un nudo en la garganta

-Estás seguro que no es por otra cosa?

-Bueno, yo quería hablar con vos - añadió Leclerc

Julie lo miró atentamente esperando sus palabras.

Antes que de alguno pudiera decir una palabra, Zayn entró por la puerta.

-Ya es hora de irnos - dijo apoyado en el marco

-Si, solo que Char me tenía que decir algo - respondió la italiana

-No es nada importante mon amour, vamos - dijo levantándose

Juliette asintió y lo miró con una sonrisa tan tierna, que él no pudo evitar sentirse mal con toda la situación.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 13 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝖾𝗏𝖾𝗋𝗆𝗈𝗋𝖾 || 𝖼𝗁𝖺𝗋𝗅𝖾𝗌 𝗅𝖾𝖼𝖾𝗋𝖼 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora