Placer

DISCLAIMER: Los personajes y lugares le pertenecen a Tatsuya Endo. Esta historia participa en el evento NSFW TwiYor Week 2024, organizado por TwiYor Base.

* Día: 1.

* Palabra/Frase: Sexo emocional.

[...]

Desde que su unión se volvió auténtica, las noches dejaron de ser un momento de exclusivo reposo para Loid y Yor. Su ahora cuarto matrimonial se convirtió en el nido de sus más profundos deseos y en la suavidad de su cama, compartían hasta el cansancio la increíble experiencia de amar y ser amados.

Ya no había secretos, tampoco miedo ni incertidumbre. Abiertos en la intimidad, se sumergieron en el aroma de los pétalos de rosa que Loid echó sobre el lecho, mientras Yor montaba a su marido con un ritmo lento y sensual. Las velas elevaron el fuego de sus cuerpos y un coro de gemidos ansiosos llenó la habitación: por fortuna, Anya y Bond estaban en casa de Becky para una pijamada y nadie los interrumpiría hasta el día siguiente.

Con cada movimiento, Loid tocaba el Paraíso; su mente hiperactiva halló sosiego entre los muslos de su esposa y cerró los ojos al sentirse envuelto por su divina calidez. ¿Cómo había sido capaz de negarse a tanto disfrute en el pasado? No supo qué responder: por largo tiempo, aprendió a reprimir sus sentimientos y su cuerpo había soportado el sinsabor de numerosas relaciones por el éxito de sus misiones; pero aquel sendero lo llevó por destinos inesperados y en uno de ellos, su agobiado corazón resucitó gracias a la mujer que amaba.

Yor echó la cabeza atrás al sentir el ascenso de sus manos por su cintura y las apretó con las suyas para que masajeara sus senos, emitiendo un jadeo tan intenso que estremeció a su esposo. Apenas llevaba dos meses haciendo el amor con Loid y contrario al «frenesí» del que hablaban sus colegas, decidió tomarse su tiempo para disfrutar cada momento. El ente que alguna vez se privó del amor propio se asombró de verse florecer como una mujer libre, cuya alma ahora clamaba el inmenso cariño que entregaba y recibía sin reservas.

─Y-Yor ─siseó el espía, cuando su interior se contrajo por acariciar sus pezones─, qué hermosa eres...

─Loid... ─finalmente pudo mirarlo y sin dejar de moverse, tomó uno de sus dedos para succionarlo a su antojo.

─Oh, Yor ─arqueó su espalda unos segundos y después se aferró a sus caderas para sentarse con ella en la cama─, Yor, por favor...

─¡Aaah! ─jadeó al sentirlo hundirse más en ella y se apegó a su cuerpo, perdida en el calor que desprendía su piel─ M-me haces tan feliz, amor...

─Y tú a mí ─lamió sus pechos─, no imaginas cuánto...

─¡Dios, Loid! ─clamó su deseo con fervor y revolvió sus cabellos rubios, bastante excitada─ Así, mi cielo, s-sigue así, así... ¡aaah, estoy tan cerca!

─¡C-carajo! ─aceleró sus embestidas, entre besos y caricias cada vez más fogosas─ Gime, amor, gime... q-quiero oírte, Yor, ¡aaah, n-necesito...!

─¡Sí, Loid, sí! ─clavó sus uñas en su espalda─ ¡Ngh, L-Loid!

Loid la sujetó mientras se arqueaba y gozó del rítmico apretón de sus paredes; contempló la cumbre de su orgasmo, su rostro sonrojado y la forma como cantaba su nombre entre gemidos placenteros... pero tuvo que contenerse: su propia excitación también había llegado al tope y no quería correrse antes de tiempo, por lo que salió de su interior y la recostó en la cama.

Yor apenas recuperó el aliento, todavía agotada por su derroche de amor, y una intensa corriente la hizo retorcerse cuando su esposo se arrodilló entre sus piernas; casi había olvidado la urgencia de Loid y con una sonrisa satisfecha, disfrutó el erótico roce de su longitud.

─Eres tan linda... ─frotó suavemente su entrada y amasó uno de sus pechos─ ¿te gusta, Yor? Dime que te gusta...

─P-por favor, Loid ─se mordió el labio al verlo masturbarse y acarició su centro para provocarlo─, no resisto más, hazme tuya...

─Paciencia, querida, q-quiero que lo disfrutes ─entre besos, poseyó su interior otra vez─. Mmm, d-debes saber cuánto te amo, Yor...

─Cariño... ─ebria de deseo, enlazó sus piernas a su cintura y jadeó al sentir cómo entraba y salía de ella─ eso, más rápido, mi amor, más, más... Dios, ¡q-qué bien lo haces, Loid! ¡Así, así...!

─¡Yor! Aaah, se siente tan bien... ─arrugó las sábanas bajo sus manos y aumentó la velocidad, refugiándose contra su cuello para resistir tan deliciosa fricción─ ¡m-mierda, Yor, me encantas!

─A mí también ─gimió más para motivarlo─, ¡m-más fuerte, Loid!

─¡Mmm, Yor! Yor, Yor... ufff, m-me falta poco... aaah, Yooor ─se movió mucho más deprisa, con un hilo de voz.

─Sí, mi cielo, sí ─suplicó entre jadeos─, córrete...

─T-tú primero... ─su cuerpo se sacudió─ te quiero sentir, Yor...

─Hazlo conmigo, mi amor ─volvió a besarlo, agitándose a su mismo ritmo─, ¡aaah, p-por favor, Loooid!

Loid ya no pudo hablar más y en lo que seguía embistiéndola, Yor disfrutó de su segundo clímax sin perder de vista el esfuerzo de su marido. A sus ojos, se veía mucho más bello y la señora Forger casi lloró de felicidad: ¡había sido tan afortunada de casarse con él! Extasiada, se rindió a su inmensa pasión y sostuvo el rostro de Loid, mientras este daba su último empuje.

Un fuerte gruñido abandonó su garganta y la tensión acumulada en su cuerpo se disparó cual gatillo, mientras sus ojos rodaban hacia arriba por el éxtasis. Por cada oleada de su liberación, se derramaba dentro de ella; repitió su nombre hasta quedarse sin aliento y una mueca de felicidad decoró su rostro ruborizado. Para Yor, no existía mejor obsequio que contemplar el estallido de placer de Loid y acompañó sus últimos gemidos, hasta que ambos se rindieron agotados sobre la cama llena de pétalos.

─Cariño ─jadeó Forger, tembloroso por su orgasmo─, gracias por esto...

─Soy yo quien debería decirlo ─le dio un beso y aspiró el olor de las velas─. Cada día me enamoro más de ti, Loid...

─Yor... ─sonrió con dulzura, a la vez que tomaba un pétalo de rosa que se había enganchado a su cabello─ ¿sabes que te amo?

La joven asintió contenta y cerró los ojos al sentir la textura del pétalo recorriendo su rostro; de repente, los labios de su esposo se apoderaron de los suyos y no tardó en corresponder a su beso, consciente de que las palabras no eran necesarias. Loid y Yor sucumbieron al placer de las caricias y en la privacidad de su cuarto, experimentaron una vez más la enorme dicha de vivir el verdadero amor.

[...]

N.A.:

¡Buenas noches! Me sumo al reto TwiYor de esta semana, ¡en serio estoy muy emocionada por las ideas que me surgen para este evento! :3

En serio, me encanta escribir a Loid y Yor en estas situaciones... conste, no lo digo solo por el tema del sexo XD, sino por la forma cómo ambos adquieren más confianza en lo que avanza el manga (si bien todavía están muy lejos de lo que se relata aquí, la importancia de su lazo emocional es crucial).

La naturalidad en sus expresiones de ánimo y cariño son únicas, me transmiten tanta emoción y esperanza cuando los veo juntos, que no me sorprendería verlos tan entregados el día que revelen quiénes son realmente. En el fondo, Loid y Yor desearían tener esa oportunidad de demostrar cuánto se aman y en la intimidad, hallarán un millón de formas de hacerlo... ¡es que se aman bien bonito! TwT

Bueno, ya, trataré de no divagar con estas notas y solo me quedaría agradecerles por leer este relato hecho con mucho sentimiento para este par tan singular. ¡Muchas gracias por sus lecturas y reviews, buena suerte a todos! :D