IV

741 51 16
                                    

Observaba la puerta de la habitación de Yoko como si fuera algo digno de admirar, desde que había abandonado la habitación y decidió visitar a la vampiro, había estado alrededor de 5 minutos fuera de su puerta preguntándose si esto había sido una buena idea.

Quizás enviar ese mensaje fue algo muy impulsivo de su parte, pero al fin y al cabo así era ella, debía aclarar su mente e ideas, pero más sin embargo no podía negar los sentimientos que sentía por la Addams, pensaba que solo se trataba de algo carnal, algo fugaz por el sueño, pero se dió cuenta que iba más allá de eso.

Necesitaba hablarlo con alguien, a pesar de lo bien que se llevaba con Dedos no se lo diría a la mano, y muy a pesar de que quedó en una buena amistad con Ajax, hablarlo con su ex no era buena opción, ni mucho menos hablarlo con Eugene, sabiendo que  el chico se llevaba bien con la chica Addams.

Sumando el hecho que el chico no sabe guardar secretos.

Antes de que siquiera pudiera tocar la puerta, es Yoko la que la abre con una leve sonrisa burlona en ella.

— Y yo que pensaba que te quedarías parada ahí por siempre, te he escuchado desde hace un buen rato que has estado ahí afuera—

La rubia algo avergonzada entra a la habitación de la vampiro ignorando aquel comentario, ya estaba aquí, necesitaba sacar todo lo que estaba pasando por su mente en estos momentos, aunque claro omitiría ciertos detalles, tiene cero intenciones de decirle a Yoko acerca de ese sueño, sabe que no es algo que la vampiro quisiera escuchar, y/o quizás sea un perfecto indicio para molestarla por el resto del año.

— Lo que dije en el mensaje era muy enserio, Yoko—.

Opta por mencionar el mensaje, ahora que puede hablar sobre eso por primera vez en voz alta, siente un pequeño nerviosismo que no le permite expresarse bien.

— Insisto Enid, no es nada nuevo, ya todos sabíamos que Merlina te cautivaba— Le responde con una pequeña sonrisa burlona en ella.

En cierta parte sabía que tenía razón, Merlina de alguna manera u otra desde que la conoció siempre llamo su atención, pero no sé permitía a si misma ver más allá que una amistad, sumando el hecho que no hace mucho fue novia de Ajax.

Antes de conocerla, tenía claro su sexualidad, o eso pensaba ella, siempre estuvo segura de su gusto por los chicos, pese que entre licántropos era normal ver parejas del mismo género, Enid estaba segura de que a ella no le gustaban las chicas, o al menos eso fue hasta que la conoció y de alguna manera se dejó cautivar por ella.

Merlina le permitió entrar, acepto su amistad, muy a su forma, pero le permitió entrar a su vida, lo cuál para Enid ha sido un gran logro y teme mucho que ese desarrollo se vaya por el drenaje por acercarse más de lo que debería.

Teme que las cosas cambien por ese beso, aún no comprende como sigue viva después de cometer tan acto atrevido, si Merlina muy a regañientas le permitía un abrazo de 5 segundos, no sabe cómo no terminó amarrada y lanzada al río por atreverse a robarle un beso.

Ella beso a Merlina..

A pesar que en ese sueño aparte de lo lascivo, recuerda un contacto de labios, y sinceramente la realidad superó la ficción, dulces y delicados labios que muy en el fondo desea volver a besar..

— Enid, ¿sigues aquí conmigo?- Pregunta Yoko al notar como Enid parecía haberse perdido en sus pensamientos unos segundos—

La rubia se encontraba con sus mejillas algo rojas, nuevamente se estaba perdiendo en esos pensamientos que no debería de tener con su amiga, la hacían sentir como una depravada

Wet Dream (Wenclair) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora