Capítulo 7

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Jisoo POV

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Jisoo POV

Hoy era mi primer día de trabajo en el hospital.
Desperté muchísimo tiempo antes del que era necesario. Estaba nerviosa.

Rosé aún no despertaba. Era normal, ya que era muy temprano y si bien recordaba su horario en la universidad era hasta dentro de unas cuantas horas.

Tomé las llaves que Rosé me había entregado de su departamento y salí de allí.

Iría caminando, la mañana era perfecta, un poco fría pero el sol estaba presente. Pasé enfrente de mi anterior edificio y mi cuerpo se llenó nuevamente de resentimiento cuando vi el automóvil de Bona estacionado.
Podría casi asegurar que ahora vivían juntos y felices en el que era mi departamento mientras ahora yo molestaba a una pobre chica que no tenía la culpa de las estúpidas decisiones que habían tomado aquellos dos.
Apresuré el paso, lo menos que me faltaba para arruinar la mañana era encontrarme con ambos.

Aún era bastante temprano como para llegar al hospital. Creo que los nervios hicieron que verificara la hora antes de salir del departamento de Rosé.
Aún tenía aproximadamente una hora libre y mientras iba caminando pasé por una cafetería.
Ingresé al local y me senté en una de las mesas mientras esperaba mi pedido.

No habían muchas personas en el establecimiento. Algo que llamó mi atención era que la puerta de entrada tenía una pequeña campana que cada que alguien entraba o salía sonaba avisando la llegada de un nuevo cliente.

Me dirigí hasta la caja ya que la mesera me había hecho señas de que mi café para llevar
estaba listo. Mientras buscaba unos cuantos dólares para pagar, la campana sonó, pero no me limité a ver quién había entrado hasta que escuché una tos para mi gusto demasiado falsa a mi costado.

Bona.
Lo que único que me faltaba.

La miré a los ojos, mientras la rabia recorría mi cuerpo. Estaba allí tan tranquila, como si no hubiera hecho nada malo, hasta que habló:

- Oh Jisoo, qué gusto verte. - mostró preocupación. - ¿Dónde estás quedándote?
¿Estás bien? - sus manos fueron hasta mi rostro y comenzaron a tocarme.

Esto era increíble. ¿Cómo podía ser tan hipócrita esta mujer y actuar de esta manera?

De forma rápida quité sus manos de mi rostro y tomé mi café. Quería largarme ya de ese lugar o estaba segura de que me lanzaría a golpes sobre Bona, no soportaba ni escuchar su estúpida voz. Empujé ferozmente la puerta de la cafetería y salí.

Miré al frente y vaya que esto era mala suerte.
Eunwoo estaba afuera recostado sobre su auto.
Se veía bien, sus cabellos un poco más largos de lo que recordaba la última vez que lo vi. Su atuendo totalmente en colores oscuros y con su boca sujetaba un cigarrillo.

Estaba nerviosa, no podía moverme de ahí.
Me había quedado completamente como una idiota al verlo.

Traté de recomponerme y respirar con calma.
Tenía que pasar desapercibida, lo menos que necesitaba era que me reconociera.

Sounds / ChaesooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora