SR JEON #2 +21✓

29- Sumergido en la oscuridad

¿Alguna vez se han sentido asfixiados, con un nudo en la garganta, inmersos en la absoluta nada, vacio, como si se te ahogaras en un profundo pozo profundo?

Era así como me sentía.

Llegar a casa se sintió peor, ver a Minsook envuelto en lágrimas diciendo "Lo siento" una y otra vez, fue como un puñal que se hundía sin parar en mi corazón.

Decidí ignorar su llanto, mi cara no reflejaba nada, estaba herido,  me sentía incapaz de reaccionar.

Solo me encerré en mi habitación oscura y fría, en una esquina envuelto en sábanas, ahí me permiti llorar abrazando mis rodillas.

¿Por qué me sentía tan culpable?

He escuchado su voz detrás de la puerta, se escucha lastimado, he escuchado el toque de su puño en la madera gruesa.

"Mi vida por favor abre"

"Déjame verte, quiero abrazarte por favor déjame entrar mi amor"

" No quiero despegarme de aqui sin verte, no puedo hacerlo"

" Todo esto es mi culpa, si yo no te hubiera dejado involucrarte en esto todo fuera diferente"

No, no eres culpable de nada, eres tan inocente como mi padre, como Chloé y como cualquier niño que pasó por lo que tú pasaste.

La única culpable es esa mujer, esa maldita mujer.

Sin embargo no puedo evitar sentirme mal, no puedo evitar querer alejarme y hundirme en mi miseria.

No quiero hablar con nadie.

No quiero la lastima de nadie.

Se que mi padre sigue vivo, pero también se que ella a atacado muchas veces y no se detendrá.

¿Qué se supone que haga?

Me siento en desventaja, herido, presionado y con ganas de gritar.

Si alguna vez pensé que Scarlett o Eunwoo eran un problema, definitivamente no se comparaban a esto.

Era una jodida locura.

Y cuando las horas no se detienen...

Limpio mis lágrimas y llevo todo el día encerrado, son las tres de la mañana, tengo hambre y aún que quisiera estar solo, necesito cuidar de mi salud.

Decido respirar profundo, dejar de llorar y volver a enfrentar la situación con ferocidad.

Me ha atacado, me ha dado un golpe bastante bajo, pero no me ha derrotado.

Aún puedo contra ella y contra quién quiera pelear conmigo.

Sigo siendo fuerte.

Sigo siendo Jeon Jimin.

Salgo sigilosamente de la habitación, Jeon ya no está, seguramente a dormido en alguna habitación de huéspedes o con Min.

Oh mi pequeño...

Sin embargo cuando bajó las escaleras decidido a ir hacia la cocina, lo veo.

Está frente a la puerta, su silueta a oscuras se posa frente a mi, está paralizado y por los ruidos que hace se que está llorando.

- Cuando te conocí... Creí que, creí que eras el niño más lindo que mis ojos habían visto.- Mi corazón se detiene, mis manos tiemblan y vuelvo a sentirme débil.- Cuando te toque por primera vez, confirme que tú belleza es excepcional, nadie se te compara.- Respira profundo, sorbe su nariz y me mira por encima de su hombro.- ¿Cómo un ser tan limpio, puro y lleno de belleza, puede enamorarse de un monstruo como yo?

Me cuesta respirar y aún que quiero gritarle y reprocharle sus palabras, nada sale de mi boca y el continúa.

- Hoy mientras te oí llorar, te vi lleno de miedo, de angustia, veo las lágrimas de mi hijo, pienso... ¿Qué mierda hice? Debí detenerla, y no lo hice.

- Jeon, no...

- Debí matarla, debí... Yo debía acabar con ella ¡Y no lo hice!

- ¡No es tu culpa!

- Soy un adulto Jimin, quizás lo que hizo conmigo cuando era un niño no era mi culpa, pero... ¿Y ahora? ¿Cómo te justifico eso, eh? Te he fallado Jimin.

Mi corazón se detiene y el golpe de realidad llega tan pronto con esas palabras.

- ¿Me fuiste infiel?- La pregunta me duele más de lo que pienso y el miedo de su respuesta me golpea.

- No Jimin, te falle de otras maneras.

- Qué estás queriendo decir...

- No hay vuelta atrás, ella hizo esto por una sola cosa. No sé detendrá, es la última advertencia.

- Lo vamos a resolver, nosotros...

- ¡Ya no! No puede haber más un nosotros si uno de los dos no está. ¡Debes entender eso!

- ¡Seguimos aquí, maldita sea!

- ¿Hasta cuándo? ¿Cuando ella te mate? Yo no podría vivir si eso sucediera Jimin, entiéndeme por un momento, por favor...

- ¡Dame la maldita cara Jeon!  Enfrentame.

- No puedo hacerlo, no puedo porque se que te ví llorar y mi corazón ya no resiste verte llorar una vez más.

- Estás actuando como un cobarde, ¡El hombre que amo no es un cobarde!

- ¡Ya no soy ese hombre joder!

Mis piernas tiemblan y quiero correr hacia el.

- ¿Vas a dejarme? ¿Es eso? Tu... ¿Por ella Jeon?

- Por ti, por nuestros hijos, por el bien de nuestra familia.

- Debes estar bromeando.- Entonces voltea y en medio de la penumbra, lo miró.

- Te amo como nunca he amado en la vida, mi pequeño ángel.

- No, cállate.

- Te amo con mi alma y todo mi ser.

- ¡Que te calles! ¡MALDITO MENTIROSO!

- Por favor, debes... Debes cuidarte, debes... Minsook, los bebés, estarán bien.

Ni siquiera podía hablar, estaba inundado en lágrimas y yo era muy diferente.

Porqué me sentía derrotado una vez más, ¿Ella había ganado?

Me había quitado el amor del hombre de mi vida, mi padre había sido herido, al accidente de Min, de Yoongi.

Realmente ella había jugado tan, pero tan fuerte, que he quedado sin fuerzas.

- Te amo angel.

Aún y cuando lo veo irse no puedo asimilar lo que ocurre y termino desplomandome en el suelo.

Mi pecho duele, tomó esa parte con fuerza, aprieto la tela de mi camisa y lloro desconsoladamente.

No puedo controlar mis gritos, estoy desgarrado, estoy herido y de la peor manera posible.

Aún así, siento unos delgados brazos envolverme.

- Por favor no llores más papito, no llores papá, ya no más.

Sus palabras calan lo más profundo de mi ser, y aún que mi hijo sigue siendo menor.

Lo abrazó con todas mis fuerzas, lloro mientras el me abraza y su presencia me hace entender que no estoy solo.

Que debo luchar por el.

Que sigue en mi vida.

No puedo rendirme aún y cuando ya no tengo fuerzas para luchar.

No cuando Minsook sigue mis pasos, no cuando sigo siendo su papito.

Simplemente aún que esté roto, no dejaré que ella mate mis ganas de destruirla, porqué ahora más que nunca, la quiero matar.