Prólogo.

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por Kletttt
por Kletttt
                                    
                                              Buenas Vampiros. 🦇
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Hefesto, es el dios del Fuego, la metalurgia y la artesanía. Era el brillante herrero del los olímpicos, creando para ellos desde casas, armaduras magníficas y maravillosos artilugios. 
Su vida nunca fue buena, pasando muchas angustia y dolor. Soportando una madre que lo repudia con todo su ser, y una familia de funcional, todos lo trataban como un ser inferior a ellos. 
Por su físico y su cojera, una lesión que lo acompaña desde que tuvo vida, su madre al nacer el dios, lo vio cómo un pedazo de excremento, por ser amable, ella lo tiró desde el olimpo, calló a la isla lemnos. 
Esa caída a un bebé recién nacido le dejó una lesión de por vida, su pierna fue la afectada, siendo tener cojera de por vida, además de no ser el prospecto perfecto de un dios, había mucha personas que no lo trataban de la mejor forma. 
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Se puede ver al dios de la forja solo.... como siempre, no es algo nuevo para el, ese día era su aniversario de bodas. 
El todavía tenía la esperanza de que su esposa lo amará, bueno la tuvo hasta un par de horas. 
Donde la encontró en una orgia con sus hermanos, burlándose de él. Su corazón roto no pudo soportar tanto dolor guardado y lloró, si El un dios lloró, por primera vez lloró, un llanto desgarrador. 
El dios como tanto pensamientos negativos agarro una daga y la puso en su cuello, iba a acabar con su vida en ese momento, cerrando los ojos, recordando su vida. 
Una madre que lo odia, su esposa se acuesta con su hermano, sus hijos lo abandonaron aunque no fueran de él, sufrió sus perdidas, su familia lo trata como un inútil. 
Recordando a sus únicas luces de esta vida, su tío Hades, sus madres y su nuevo ser preciado ¿Odin? 
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El dios ya preparado para su destino, hace el movimiento para acabar con su vida, pero de repente no se puede mover. 
Abre sus ojo y observa a una persona muy conocida, sus ojos entrecerrados se fijaron en la persona que lo detuvo de su muerte. 
"¿Por qué me detuviste? " exclamó Hefesto. 
La persona sonrió a Hefesto. 
"¡Hefesto, éste no es El camino, te doy una oportunidad de ser un nuevo dios, solo tienes que venir conmigo y dejar tu dolor en el pasado! " contestó la persona. 
Hefesto sólo lo miró analizando la situación. 
"¿Oportunidad de ser un dios nuevo? " pregunto Hefesto. 
"¡Si, tengo unos métodos de poder hacerte uno de nosotros Hefesto! ¿Aceptas? " dijo la persona. 
Hefesto lo miró a lo ojos con seriedad, y sonrió. 
"Acepto ¿? " contestó Hefesto. 
La persona solo sonrió. 
"¡No te arrepentirás Hefesto " exclamó la persona. 
Así llevándose a Hefesto a otra parte. 
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Fin....
---' Estas no son historias, son drogas.
¿Qué tal el prólogo?