Me sacrifique por que Te Amo

Parte 1

En la penumbra de un bosque una joven caminaba sin un rumbo fijo, aunque si tenia un destino en su mente, solo caminaba siguiendo su instinto, cada minuto volteaba para asegurarse que nadie la seguía. Continuo su camino hasta llegar a un enorme lago, camino hasta la orilla de este deseosa de tocar el agua, se detuvo, miro a su alrededor y comenzó a desvestirse, al terminar se sobre salta al escuchar el crujir de unas hojas...

-¿Quién anda hay? – preguntó, pero no hubo respuesta, observo el bosque cuando de este sale una lechuza, suspiro- Solo era una lechuza, será mejor que me de prisa- la chica agarro su ropa y la escondió entre unas rocas para luego entrar al agua, una vez dentro, cerro los ojos sintiendo como su cuerpo cambiaba, en menos de dos minutos, su cuerpo cambio ya no era humana, sus piernas habían sido reemplazadas por una hermosa aleta de pez color esmeralda la cual brillaba con la luz de la luna, una vez asi la chica se sumergió en el lago, nadando hasta una cueva submarina donde se acomodó, mirando el techo de la cueva- Cada vez es más difícil estar lejos del agua- miro su aleta- hasta cuando durara esto, no voy a poder seguir ocultándolo...- sollozo cubriendo su rostro- ¿qué voy hacer?

* -cambiaste tu vida por salvar la vida de un demonio? Eres de admirar, pero tu maldición no tiene cura, tú lo elegiste asi... mientras más pase el tiempo continuará hasta que ya no soportes estar fuera del agua y...

-Entonces seré así para siempre?

-Mmm solo puedo darte esto- la joven recibió una pequeña pócima- no te queda mucho tiempo, te convertirás en una sirena completa se apoderará de ti antes de la siguiente luna llena, bebe eso al menos, podrás estar en tierra bajo la luz del sol pero deberás volver al agua en las noches

-Está bien

-Hiciste algo muy estúpido niña, cambiar tu ser por alguien que jamás te lo agradecerá y sin saber las consecuencias de tu decisión

-No sé por qué lo hice, simplemente, no podía dejarlo morir, es todo... gracias por esto – antes de poder irse

-Espera niña

-Si?

-Tal vez tengas una salida, pero no será fácil y tampoco te aseguro que funcione

-A que se refiere?

-Es posible que si cambias tu sangre puedas quitarte esa maldición de sirena

-No la entiendo

-Es posible que si cambias tu sangre y te conviertes en Yokai el espíritu que te posee desaparezca, pero para hacerlo deberás buscar a un Yokai de sangre pura y que esté te marque como suya, solo así cambiará tu sangre y podrás deshacerte de ese mal

-Mmm que pasaría si al final...

-Perderás tu juicio, cazaras por hambre a todo ser que aparezca en tu camino sin importa que sea o quien sea esa es la maldición que posees, tu alma se perderá y tu cuerpo no será tuyo...

-Mmm lo que me posee se adueñara de mi cuerpo...ya veo ...*

-¿Maldición, enserio es mi única salida?... ¿Por qué tuve que hacerlo? ¿Por qué? - esa noche la chica lloro, sus lágrimas desaparecían en el agua, y asi estuvo hasta quedarse dormida con una voz que decía en su cabeza "serás mia"

Por otro lado, al día siguiente, en una pequeña aldea unos amigos se preparaban para emprender su largo viaje a su misión, este pequeño grupo estaba compuesto por un monje, una exterminadora, un niño zorro y un hanyou y claro faltaba alguien importante...