~[7]~

125 17 3
                                    

Una castaña tocaba desesperada la casa de su novia, cuando la puerta se abrió no dudó en entrar, se dirigió a la habitación de su novia, sin importarte los reclamos y amanezas de los padres de esta.

Llegó a la puerta, esperaba que sus tres horas de reflexión fueran lo suficiente para recuperar a su novia no quería perderla por más hipócrita que sonaba.

Tocó la puerta pero no escuchó ningún ruido, no se iba a ir hasta disculparse con aquella linda rubia y esta vez cambiar realmente.

Ver la expresión de tristeza de su novia la hizo reaccionar del todo el daño que le estaba haciendo.

Giró la perilla de la puerta y encontró a su novia dormida.

Se veía tan tranquila y tan hermosa.

Lástima que lo había jodido todo.

Se tiró sobre ella a llorar y dispuesta a pedirle pero se detuvo al sentir la piel de su novia más pálida y fría de lo normal.

"¿L-lili?" Murmuró mientras la movía suavemente.

Pero Lisa no respondía.

"Lisa despierta por favor" dijo entrando en pánico "No".

Acostó su cabeza en el pecho de la menor para sentir su corazón pero no lograba sentirlo, el corazón de Lisa no latía.

"No, no, no, Lili despierta, lo siento ¿si?, Lili esto no es divertido" decía la castaña mientras movía el cuerpo de su novia "Por favor despierta, prometo cambiar lo juro pero despierta" suplicó sintiendo las lágrimas caer de sus ojos.

Sintió algo caer de las manos de su novia miró lo que había caído y lo recogió, eran las pastillas de dormir de Lisa.

Y no había nada.

"¡Lalisa!" Gritó Jennie al saber que su novia estaba muerta "¡Lo siento cariño, lo siento tanto, te amo!".

Los padres de la rubia entraron al cuarto al escuchar los gritos de la castaña.

"¿Que diablos esta pasando aquí?".

"¡Qué tipo de padres son ustedes, su «querida» hija está muerta desde hace tres putas horas y ustedes ni se enteraron!" Los padres de Lisa abrieron sus ojos.

"Eso es una broma, Lisa no puede estar muerta ¿Verdad Marco?" Dijo su esposa.

Pero al ver el color del cuerpo de su hija la hizo dudar.

Se acercó a ella, sintió su piel fría, sin poder creérselo puso su oído en el pecho de Lisa, no sentía su corazón, su vista se nubló.

Su Lisa había muerto.

Y ahí sintió remordimiento y culpa.


Fake Love (Jenlisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora