La reunión

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Kakeru ya estaba en el boliche, donde se reunirían todos, ya estaban casi todos los invitados, solo faltaba Yamato.

Ji Wook- Kakeru, ¿Estás seguro qué Yamato vendrá?

Kakeru- Si, solo espera unos minutos más.

Yamato llegó corriendo.

Yamato- ¡Perdón por llegar tarde!

Ji Wook- Está bien, Yamato, entremos.

Yamato era muy popular entre las chicas, por lo qué casi todas las señoritas qué asistieron estuvieron con él toda la reunión.

Kakeru- Agh, ¡¿Por qué es tan difícil jugar bolos?!

Una chica vió a Kakeru y decidió acercarse a él.

Akane: Es muy difícil, ¿Verdad?

Kakeru- ¡Sí! Creí qué imposible.

La chica soltó una leve risa y comenzaron a jugar bolos los dos.

Kakeru- Ahora vuelvo, voy al baño.

Cuando Kakeru salió del baño, pasó aún lado de Yamato y las chicas qué estaban con él, pero la conversación le llamó la atención y se quedó parado ahí para escuchar.

Makomo- Entonces, Yamato, ¿Cuál es tu tipo?

Yamato- ¿Mi tipo?

Makomo- ¡Sí! Dinos.

Yamato- Mi tipo es, alguien de la infancia.

Al escuchar eso, Kakeru se sorprendió y comenzó a intentar averiguar a quién se refería.

Makomo- Vaya, entonces supongo qué no tenemos oportunidad...

Las chicas rieron.

Después de un rato de tanto pensar, Kakeru se dió cuenta qué el único amigo qué Yamato tenía de la infancia era él.

Kakeru dijo en su mente.

Kakeru- ¡¿Le gusto a Yamato?! ¡No! ¡No puedes ser! Yamato y yo somos mejores amigos desde la infancia...

Kakeru decidió ya no prestarle atención a ese comentario y fué a la máquina de peluches, ahí se encontraba Akane.

Akane- ¡Hola, Kakeru!

Kakeru- Hola, Akane.

Akane- Kakeru, ¿Podrías intentar sacarme un peluche? Yo no puedo.

Kakeru- Está bien, Akane.

Kakeru intentó bastantes veces, pero en ninguna pudo obtener el peluche.

Kakeru- Vaya, ya no tengo dinero...

Akane- ¡Espera aquí! Voy a buscar cambio!

Yamato vió a Kakeru y fué con él.

Yamato- Permiso, Kakeru.

Kakeru solo observó a Yamato.

Yamato obtuvo un peluche en el primer intento.

Yamato- Ten, Kakeru.

Kakeru- ¡Ves, eres bueno en todo!

Yamato solo río.

Yamato se fué y Akane regresó.

Akane- ¡Wow! ¡Lo conseguiste!

Kakeru- ¿Eh? Ahh, no, es qué este es de Yamato.

Mintió para así el poder quedarse con el peluche.

Todos salieron del boliche y comenzaron a despedirse.

Akane- Kakeru, ¿Me das tu número?

Kakeru- ¡¿M-mi número?!

Akane asintió.

Kakeru- Bien.

Kakeru y Yamato iban caminando juntos a casa de Kakeru.

Yamato se quedó pensando en si hacer lo qué estaba pensando o no, y al final, lo hizo.

Yamato- ¡Kakeru! (Lo tomó feo brazo)

Kakeru- ¿Qué pasa, Yamato?

Yamato- Si tan solo estuviéramos juntos...

Kakeru se sorprendió.

Kakeru- ¿Qué? ¿A qué te refieres?

Yamato- Kakeru, tú me...

En eso llegó Mikoto

Mikoto- ¿Qué están haciendo?

Kakeru- Hola, Mikoto, nada, ya me voy para mí casa. ¡Adiós, Yamato!

Yamato- Adiós, Kakeru...

Mikoto- ¿Qué pasó?

Yamato- Quería decirle lo qué sentía, pero sentí miedo y Kakeru ya se fué.

Mikoto- Ay, hermano. Debes superar ese miedo, mientras más te lo guardes, más te va a doler.

Yamato- Lo sé, Mikoto, mejor vayamos ya a casa.

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