『𝑱𝒐𝒏 𝑺𝒏𝒐𝒘』ᵒᶰᵉ ˢʰᵒᵗˢ ⁺¹⁸

4-𝐏𝐫𝐢𝐜𝐞 𝐨𝐟 𝐌𝐲 𝐒𝐞𝐜𝐫𝐞𝐜𝐲

Resumen: Jon se olvida un día de llamar a la puerta y descubre algo que no debía

 Advertencias: smut, p en v sexo, atadura de pecho, juego de pezones, burlas, etc 18+

 autor original: https://www.tumblr.com/axelsagewrites/718333433192071168/hey-i-love-your-writing-and-was-wondering-if-you?source=share

 ┗━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━┛

Por alguna razón, Jon siempre acababa haciéndose amigo de la persona más débil del grupo. Cuando llegó por primera vez al Muro fue a Sam a quien tomó bajo su ala, Fantasma a su lado. Algunos de sus compañeros bromeaban sobre lo caritativo que era de él. Estas burlas sólo empeoraron cuando tomó al mudo bajo su ala.

Cuando llegó a la muralla se encontraba entre un grupo de otros siete nuevos reclutas. Ninguno de ellos parecía especialmente amistoso y todos eran mayores que tú y un poco más altos, lo que te hacía destacar aún más. Durante tu viaje todos habían asumido que eras callado hasta que estuviste frente al Lord Comandante Jeor Mormont.

"¿Cómo te llamas, muchacho?" preguntó Mormont. Tu boca permaneció cerrada. Cuando decidiste unirte a la Guardia de la Noche te fue fácil cortarte el pelo. Aprender a envolverte el pecho hacia abajo fue más difícil, pero lo lograste, sobre todo porque en la muralla tenías que usar muchas capas para mantenerte caliente. Sin embargo, algo que no podías arreglar era tu voz.

Habías intentado probar una voz más grave antes de ir a la pared, pero siempre te encontrabas con miradas confusas o gritos de enfado cuando pensaban que les estabas tomando el pelo. "Contéstame, chico", ordenó.

Los nuevos reclutas te miraron con curiosidad, dándose cuenta de que nunca habían oído tu voz en las semanas que llevabas viajando. Los hermanos actuales te miraban con un silencio atónito, ya desafiando órdenes. Mormont suspiró, medio gruñendo, y te tiró hacia delante por la mandíbula, forzándote a abrir la boca. "Todavía tienes lengua, muchacho", dijo, empujándote hacia atrás. "¿O es que no sabes usarla?".

Tú negaste con la cabeza. Algunos de los hermanos se rieron entre ellos ante la exhibición, Jon los observaba con intensa curiosidad. Eras muy guapa para ser un chico, pensó. "Lord Comandante, no ha dicho una palabra desde que se unió a nosotros", le dijo uno de los hombres de tu grupo.

"Oh genial, un mudo", refunfuñó en voz baja, "Bien bien ¿alguien sabe su nombre?" nadie respondió. "Tendré que hablar con el Maestre Aemond sobre esto. Sabran los Dioses cómo vas a jurar tus votos".

Por suerte, el maestre Aemond era mucho menos juicioso que muchos de los muchachos de la guardia. Hizo que juraras tus votos en una ceremonia silenciosa y te proclamó tan apto como cualquier otro hombre, sólo que menos hablador. Incluso te aceptó como su mayordomo.

Sin embargo, cuando no podías hablar era difícil hacer amigos. Cuando alguien te arrojaba avena húmeda por las mañanas, no podías hacer otra cosa que mirarle con desprecio. Al fin y al cabo, no eras sordo, pero muchos supusieron que lo eras porque murmuraban de ti en voz no muy baja.

Dos rostros amables te miraban. Sam Tarly y Jon Nieve, y un lobo huargo blanco que nunca estaba lejos de Jon, llamado Fantasma. Cuando se sentaron, cesaron los cuchicheos.

Sam se contentaba con compensar tu falta de conversación y a menudo te hablaba durante las comidas y las guardias. Se conformaba con que asintierais con la cabeza a sus preguntas. Jon era más callado que Sam, pero eso no era difícil. También era increíblemente guapo, sobre todo para ser un chico. No podías evitar preguntarte si también era una chica en secreto, pero te imaginabas que su barba incipiente tenía un aspecto demasiado real para ser fingida.