Dousha Bao

Capítulo 13

La expresión de Chen Jiao era un poco fría y sus cejas estaban torcidas. Miró a Wang Yincheng y señaló al desordenado grupo de personas en el pasillo: "Estoy realmente molesto. ¡Es una mierda pelear con un niño pequeño!"

Wang Yincheng vio que Chen Jiao estaba empapado de sudor y preguntó: "¿Qué está pasando?"

"¡Oh, ni lo menciones! ¡Los niños de la clase de mi hijo están peleando con un grupo de niños de otra clase. De hecho, está bien, no es gran cosa, la maestra logró llegar a tiempo, pero hubo un niño gordo de tercer grado que se rompío la cabeza. El jardín de infantes tiene su propia forma de lidiar con este tipo de cosas, y no sería tan problemático, pero la mamá se acercó y no quiso dejarlo pasar. La familia del niño gordo tiene mucho dinero. El año pasado, financió la construcción de un edificio de música para la escuela. Mi hijo y un niño de su clase tomaron la iniciativa de pelear y aunque se pueda resolver rápidamente, una vez que la madre del niño gordo crea problemas, otros padres también empiezan a crear problemas. Joder..."

"..."

Wang Yincheng nunca había criado a un niño. No sabía que al tener un hijo, se enfrentaría a varias cosas embarazosas. No sabía cómo consolar a Chen Jiao.

Sin embargo, Chen Jiao de repente se volvió y lo miró a la cara por un momento: "Oye, no me extraña que el director se haya equivocado de persona, te pareces demasiado al amigo de mi hijo".

Wang Yincheng pensó que era vergonzoso e inexplicable cuando pensó en el asunto en este momento. ¡¿Qué tan similares son para equivocarse a primera vista?!

Chen Jiao miró de nuevo: "Oye, oye, no he visto mucho a ese niño, solo lo vi cuando la maestra lo llamó y no le presté mucha atención. ¡Pero creo que realmente te ves como él!" Chen Jiao siempre ha sido responsable de recoger a su hijo Ye Fei, y siempre ha sabido que hay un niño llamado Liu Xu que tiene una buena relación con su hijo, pero no lo ha visto mucho, porque Liu Heng recogerá a su hijo a tiempo sin importar lo ocupado que esté, es muy puntual. Pero Chen Jiao es una persona descuidada, y básicamente llegará tarde cada vez que recoje a su hijo. Afortunadamente, la mayoría de los padres que vinieron a recoger a los niños tampoco llegaban a tiempo, por lo que la falta de responsabilidad de Chen Jiao fue asimilada como la falta de fiabilidad de todos.

Wang Yincheng tomó un respiro y movió su rostro para mirar el conjunto de personas no muy lejos, pensando de repente que su niño ahora debería estar en el último grado.

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Si incluso Chen Jiao quisiera, entonces, por supuesto, otras personas también podrían admitir sus errores, incluida la mamá del niño gordo.

La mujer es muy joven, su color de piel es blanco y elegante, está adornada con joyas nacaradas, un collar de jade y una pulsera de ágata con cadena de oro. Ella solo abrazó a su hijo en la enfermería como un bebé. No es de extrañar que ahora esté enojada. Su familia invirtió mucho dinero para construir un edificio de musica. Al final, su hijo fue golpeado e incluso llegó a romperse la cabeza.

La mujer corrió al segundo piso, y miró a Wang Yincheng, sosteniendo su falda y señalando a Wang Yincheng, dijo enojada: "¡Es su hijo quien alentó al niño a pelear y también golpeó a mi bebé! ¿Qué haces? ¿Cómo educas a los niños? ¡¡¡Qué clase de padre eres!!! ¡¡¡Cómo es que mi bebé, que es tan bueno, fue golpeado por el inculto de tu familia!!!"

La mujer corrió y se paró frente a Wang Yincheng con una mirada fulminante, y los aretes de joyas de color azul zafiro captaron los ojos de la gente.

Chen Jiao y Wang Yincheng estaban atónitos, y Wang Yincheng no había tenido tiempo de hablar. Chen Jiao regañó con calma: "Oh, jodete..."