El cuervo y la sacerdotisa (Traducción)

Capitulo 17

Después de que Itachi se fue, Kagome puso sus manos en sus caderas y se puso a trabajar. Lo primero que hizo fueron los platos amontonados en el fregadero, a la altura de una montaña. Le había llevado unos buenos 30 minutos lavarlos y secarlos. Después de eso, limpió la habitación de Naruto. Limpió las cartas que habían jugado, los cartones de leche vacíos, los tazones de ramen que estaban al otro lado de la habitación, tiró la comida en mal estado en la cocina de Naruto y puso la ropa sucia en un cesto de ropa sucia.

Mientras se acercaba el mediodía, Kagome se sentó en la pequeña mesa de la cocina con la cabeza sobre la mesa y las manos extendidas sobre ella.

"Estoy agotada. Nunca he tenido que limpiar tanto", murmuró Kagome en la mesa. Se levantó y abrió la nevera para comer algo. "Oh, sí... No hay comida."

Kagome suspiró y salió del apartamento. Tenía un poco de dinero de su misión, lo suficiente para comprar comida hasta que tuviera una nueva misión. Con un poco de suerte.

Después de comprar, llenar el refrigerador y llenar su estómago, rápidamente comenzó a lavar la ropa. El detergente ni siquiera estaba abierto. Era básicamente nuevo.

~Salto de tiempo~

Naruto regresó bastante tarde ese día. Cuando entró casi se cae. Estaba en shock. Nunca había visto su apartamento tan... limpio. Kagome todavía estaba sentada en la mesa.

"¿Kagome...?" él puso una mano sobre su hombro.

"¡Naruto Uzumaki!" Ella espetó, saltando. Naruto cayó sobre su trasero como resultado de su movimiento repentino.

"S-s-s-si?"

"¡Cómo pudiste vivir en una casa tan desordenada y no comer nada más que ramen!" ella puso sus manos en sus caderas y lo miró fijamente.

"¡Lo-lo siento!" dijo rápidamente. Kagome suspiró y se arrodilló frente a él.

"Por ahora no comerás solo ramen todo el día. A partir de ahora cocinaré". Ella sonrió y le ofreció una mano. Naruto sonrió, tomó su mano y le permitió ponerlo de pie.

"Gracias Kagome."

"Sí. Además, de ahora en adelante, como yo lavo la ropa, tú eres responsable de guardar tu propia ropa".

Los hombros de Naruto se hundieron, "Bien".

"De todos modos. Volveré pronto. Necesito ir a ver a Mikoto." Kagome abrió la puerta y interrumpido. "Naruto, ¿me harías un favor rápido mientras no estoy?"

"¿Mmm?"

"Necesito que consigas una copia extra de la llave de la casa. Por si acaso". ella sonrió. Naruto asintió mientras ella cerraba la puerta y se dirigía al recinto de los Uchiha.

El sol había comenzado a ponerse. Mientras se dirigía a la casa de Mikoto, vio a Itachi y Shisui que parecían bastante serios. Itachi se detuvo y fue a decir algo, pero apareció el hermano pequeño de Itachi, Sasuke. Shisui se alejó. Fue como si se hubiera pasado un mensaje silencioso entre los dos.

"¡Hermano mayor!" Sasuke corrió hacia Itachi sin darse cuenta de Shisui. "¿Terminaste con tu misión? Si es así, ¡ayúdame a entrenar!"

Itachi le dio a Sasuke una sonrisa comprensiva. "Lo siento, Sasuke. Tengo una citación urgente."

Sasuke infló sus mejillas, pero no dijo nada más.

"Itachi debe estar muy ocupado siendo un ANBU y todo..." pensó Kagome mientras se acercaba a ellos.

"Hola Kagome," Itachi le sonrió.

"Buenas tardes muchachos." Ella le devolvió la sonrisa.

"Lo siento, no puedo quedarme mucho tiempo. Tengo que irme", asintió Kagome e Itachi desapareció.