El cuervo y la sacerdotisa (Traducción)

Capitulo 25

La sonrisa en el rostro de Kagome nunca desapareció mientras ella, Itachi y Naruto caminaban a casa. Su mano estaba enredada con la de Itachi. Naruto caminó junto a su figura materna con las manos entrelazadas detrás de la cabeza.

~Flashback~

"Kagome." susurró lo suficientemente bajo como para que sólo ella lo escuchara.

"¿Mmm?" ella miró al guapo Uchiha.

"¿Quieres ser mi novia?"

Su rostro se volvió de 50 tonos de rojo, su corazón latía con fuerza en su pecho mientras lo miraba con grandes ojos marrones.

Finalmente. Después de lo que pareció una eternidad...

"Sí..." ella respiró.

~Fin del flashback~

No podría ser más feliz de lo que ya era. Tenía un maravilloso novio increíblemente hermoso y una casa, a pesar de que la compartía con Naruto. La vida no podría ser mejor que esto.

"Kagome, deberías convertirte en un ninja médico", sugirió Itachi. "Tus habilidades curativas superan a cualquier ninja que haya encontrado con habilidades curativas".

"Hmm. Lo pensaré." algún lugar al que ella pertenecía. Ella no era inútil aquí. Sabía cómo manejarse sola.

El trío se detuvo ante el edificio de apartamentos. "¡Voy a subir!" él se alejó corriendo antes de que ella pudiera protestar, dejándola a ella e Itachi solos.

"Giro de vuelta." él dijo. Kagome levantó una ceja pero hizo lo que le dijo y le dio la espalda. Itachi se desabrochó algo alrededor de su cuello y se puso detrás de ella. Kagome sintió algo contra su clavícula. El collar que Itachi alguna vez usó ahora yacía alrededor de su cuello.

"Itachi..." ella lo tocó y lo encaró. "Gracias." ella le rodeó la cintura con los brazos.

"No es un problema." dijo, devolviéndole el abrazo.

"Bueno, ya que vamos a dar regalos", Kagome sacó algo de su bolsillo y lo sostuvo ante Itachi.

"¿Qué es?" preguntó mientras tomaba el collar. Adjunto a él había un pequeño fragmento rosa.

"Es el fragmento del Shikon No Tama". ella dijo. "Dónde quiera que vayas, siempre estaré contigo". ella sonrió. Él sonrió y se lo puso.

"Gracias." Itachi se inclinó y besó a Kagome en la mejilla.

Ella se sonrojó. "Probablemente debería irme antes de que Naruto se meta en problemas."

El asintió. "Está bien... te veré más tarde. Tengo una misión mañana y no volveré hasta dentro de unos días".

Ella le devolvió el gesto y abrió la puerta.

Esa noche, Kagome soñó pacíficamente con ella e Itachi viviendo felices para siempre.

¿Pero cuánto duraría?.