Te amo ♡|♡ Tomtord

3

3 años después...

En la armada roja.

En aquella base había avanzado mucho, anteriormente habían presentado un ataque de otra armada enemiga, pero, no contaban que ahora tenían a un "monstruo" defendiendo a la base, Tord.

El de peinado de cuernos había estado encadenado en esa jaula durante estos 3 años.

Tenía moretones, raspones, balas adentro de su cuerpo, latigazos, lastimadas provocadas por inyecciones, estaba sucio, casi siempre con frío, etc.

Obtuvo todo eso por aquella guerra y por los maltratos de su padre.

A su padre no le importaba si se moría, podría hacer más creaciones a su antojo.

Ahora mismo su padre iba en camino donde estaba tord.

Al llegar, el último mencionado estaba tirado en el piso temblando y sus ojos parecían estar perdidos, como sin vida.

- ¿que quieres?... - dijo en un susurro pero que pudo oír muy bien Eric -

- Solamente quería ver tu despreciable ser  - dijo con voz arrogante acompañada con una sonrisa egocéntrica acompañada en su rostro -

- ...Te odio... - dice murmurando -

La tensión se sentía en el aire.

- Y yo a ti, solo eres un desperdicio, igual que tu madre - tenía un tono de voz burlón -

Tord, al escuchar eso, reacciono levantándose del suelo tratando de acercarse a su padre con malas intenciones sacando algunas de sus partes de monstruo pero las cadenas lo hacían permanecer en el mismo lugar adentró de la jaula.

- ¡A ella no la metas, bastardo! - Tord mostraba ira juntos a sus colmillos mientras se aguntaba las ganas de llorar y su padre se aguntaba la risa -

Pero derrepente se escucho un estruendo seguido de disparos y gritos.

No paso mucho para que unos soldados irradiando miedo fuera a la habitación donde se encontraban los dos.

- ¡Jefe! ¡La base enemiga nos ataca! - Dijo uno de ellos -

Eric maldicio en silencio.

- ¡Preparen las armas y saquen al monstruo! - dijo mientras se retiraba -

Sin perder tiempo sacaron a Tord de la jaula para ponerle rápidamente un collar que daba descargas eléctricas, esto era por si desobedecia.

Le inyectaron algo en el brazo para que se convirtiera rápidamente en bestia, el de rojo daba quejidos de dolor mientras sacaba su cola, cuernos, garras, etc. Todo de color vino.

Con las cadenas aún puestas en el cuerpo de Tord, lo tomaron como si fuera una correa y lo llevaron arriba de la base donde se encontraba la guerra.

Tord tenía miedo, aunque no era su primera vez en una guerra, el era el blanco, ya que el era algo "llamativo" los enemigos se sentrarian en matarlo.

Se oían disparos, gritos, muertes, tanta desesperación.

Empezaron a dispararle a Tord y este rugia de dolor que inmediatamente se abalanzó a sus atacantes, para matarlos aplastandolos con su pata.

Se adentro más en el campo de batalla siendo recibido con algunos disparos.

Después sintió que algo le cayó a sus garras, bajo la cabeza para ver que era, una granada de alta potencia.

Se le heló la sangre y solo se le ocurrió escapar de esa zona.

Mato a algunos durante su huida, pero después se encontró a Paul y a Patrick que instintivamente voltearon a ver al chico comunista.

- ¡Tord, dios, estas lleno de sangre y lastimadas! - dijo Paul preocupado aunque era de esperarse que el cuernitos se viera de esa forma tan deplorable -

- ¿Están bien ustedes? - dijo ignorando la preocupación de Paul con una voz algo gruesa -

- Tord, estamos bien, pero eso no importa, estas muy mal - esta ves lo dijo Patrick -

- Pero no puedo hacer nada al respecto, me ven como objetivo principal -

Patrick pensó un poco pero al final Paul dijo

-  Pero... ¿y si tomamos esta oportunidad para que puedas escapar?... -