¿Cuánto Tiempo Te Quedarás Conmigo? •IAGS•

I

Pov Ivan

Cómo me cae mal plebes, hace unos meses que pues mi papá hizo movimientos en su organización, debido al lamentable fallecimiento de uno de mis hermanos, no me quiso dejar sin seguridad a mi, hace 6 meses que volví de Canadá y bueno he estado muy cuidado por Karina la plebe chismosa que es jefa de mi escolta, yo no la quiero pero mi apa no me ha dejado quitarla.

K: Entonces así podemos proteger ese anillo de seguridad y que pases desapercibido al igual que tus hermanos en caso de que el ancla ande cerca... ¿Me estás poniendo atención Ivan?

I: Si si, claro está bien lo que dices *dejando de ver el celular*

K: pendejo no me estabas poniendo atención *le quita el celular*

I: hey, ora ya pareces novia tóxica, cálmese la verdad no porque andaba quedando con la Priscila

K: *nego y le regreso el celular* bueno igual haré lo que convenga, te dejo *salió*

Y es por eso que a veces no la soporto, siento que se toma atribuciones que no le corresponden, se que mi padre le encargó bien su tarea pero a veces exagera.

Pasadas las horas alistó las camionetas para salir e Ivan ya listo, arreglado salió, Karina juraba que nunca le había despertado nada pero ese día el vato se veía muy bien.

I: amonos oye, ¿Porque no te pones otra ropa? O no te dejan

K: no tengo por qué, yo nadamás voy acompañándote, no voy de fiesta

I: que amargada, por eso te anda dejando el Vicente *se rió*

K: Ay cállate y súbete Ivan, a ti que te importa eso *dijo un poco seria, nunca le había gustado hablar de su vida privada y menos de su deteriorada relación con el Vicentillo uno de los hijos del Mayo Zambada*

I: Ay ya no te enojes, acuérdate que la que está más cerca de los cuarenta digo treinta eres tú *subió a la camioneta*

Ella se fue en otra camioneta junto con otros escoltas atrás de dónde llevaban a Ivan.

*En el antro*

Pov Karina

Estoy cerca de la mesa donde se encuentra Ivan con aquella tipa, la verdad nunca le he conocido a alguien que le dure más de tres semanas. Y siempre tenía un estereotipo para escoger a las chicas, rubias, plásticas con maquillaje de payaso y uñas del 10.

Ví después que llegaron Ovidio y Alfredo y empezaron a hablar, veía que Ovidio como que buscaba a alguien hasta que me vio y se acercó conmigo, siempre habíamos tenido una buena amistad ya que yo en un principio no solo cuidaba la seguridad de Ivan sino de los tres.

O: que onda Nina *la saludo*

K: hola Jerry, qué andan haciendo? *correspondi el saludo*

O: pues vinimos a hablar de unos asuntos con el Ivan y pues a echar unos drinks, ya teníamos rato que no salíamos ¿Cómo ha estado la cosa?

K: interesante, y no invitan perros *reí* bien pues ahí ya sabes aguantando a tu hermano y pues al cien con el señor

O: ya me imagino, ándale vente te invito *me agarró la mano*

K: eh pero ando jalando no debería

O: ay ya ombe tu eres la jefa aparte traes a los otros vatos ni que fuera la primera vez que te pones peda andando con nosotros

Asenti tenia razón y reí, fui con el y ahí saludé al Alfredo, la tipa que estaba con Ivan me dió una mirada de enojo e igual Ivan siempre de mamón pero eso me agradaba a mí me gustaba causar discordia.

A: bueno ándale tómate unos tragos *me dió un vaso con whisky*

K: gracias Al

I: ¿Cómo porque vas a tomar? No weyes, no hagan que se tome atribuciones que no le corresponden *me quito el vaso y lo mire solamente*

O: no seas mamón Ivan, ni que fuera la primera vez que toma con nosotros, aparte es justo no? Ha trabajado bien la plebe

I: Neh, no lo es que se chingue

K: nimodo será otro día morros, cuando ande franca los busco, cuídense Ovidio me llamas otro día *el asintio y me fui, le di unas indicaciones a Rayo y Piyi que también estaban ahí al pendiente, me salí a fumar un cigarro*

A veces me cagaba Ivan pero lo soportaba por Don Joaquín, le debía mucho por el apoyo que me dió cuando yo vivía muy pobre, al principio yo no estuve de acuerdo con seguir este camino, convertirme en una reconocida sicaria pero cuando conoces las carencias y el estar sin algo en tu estómago al diario si que pesa y yo me arriesgue.

No me siento jefa ni nada, solo alguien más que con méritos se ha ganado su lugar, ahora tengo donde dormir y comida en la mesa pero con la presión de no ser atrapada quizá sea el precio que se paga por querer vivir bien.