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Kiri conoce al espíritu del bosque

—No puedo —espetó, sin darse cuenta de que había levantado la voz

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—No puedo —espetó, sin darse cuenta de que había levantado la voz.

Cuando se dio cuenta, bajó las orejas, la cara de su padre no parecía dejarle mucho más margen de error. Necesitaba pensar bien lo que quería decir para que pudiera avisarla, pero no podía. No podía, su mente le gritaba el nombre de Maherye. Protegerla, ¿de qué? Todavía no lo sabía bien, tal vez no quería que ella se enfadara con él por su error.

—¿Por qué no puedes, eh? —Lo'ak no supo que hacer en ese momento, así que soltó parte de la verdad.

—Ella... ella nunca ha estado con nadie, no puedo... no puedo obligarla a que conozca a nadie, no... —negó con la cabeza. Excusas, ¡necesitaba excusas! Pero no se le ocurría nada. Oh, Gran Madre, necesitaba un milagro.

—¿Ella?

Oh, mierda.

—Sí, ella, no puedo...

—¿No quieres que la conozcamos?

—No. —Demasiado tajante, tal vez. Pero su padre lo entendería, ¿verdad? No podía ser tan estúpido. Era un adulto joven en este instante, podía comprender que estuviera con alguien, ¿verdad? Por la Gran Madre, que fuera así, porque sino se tiraría de algún lado.

Vio a su padre bajar las orejas y echarle una mirada a su madre, por el rabillo del ojo la vio reprimiendo una sonrisa, o tal vez una carcajada. ¿Se estaba riendo de él o de su padre? ¿O de ambos? Por la cara de su padre casi pudo jurar que se estaba riendo de ambos.

Sus hermanos estaban igual que él: no tenían ni idea de qué demonios estaba pasando. Tuk lo miró, apenada, parecía preguntarle en silencio si volvería a ver a Maherye. Él la miró un segundo, sin saber cómo responder en silencio o qué decirle. Tampoco sabía qué pasaría.

—Quiero conocer a esa chica...

—No voy a obligarla —lo interrumpió.

—Déjame terminar —ordenó. Lo'ak se quedó callado—. Quiero conocerla, cuando quiera ella, no la escondas.

Él torció la boca, mirando a su padre en silencio. No sabía cuándo sería eso, o si en algún momento ella estaría preparada para conocer a alguien más. De todos modos, asintió, aunque suponía que su padre se había dado cuenta de que él tampoco tenía idea alguna de cuándo sucedería eso que quería.

 De todos modos, asintió, aunque suponía que su padre se había dado cuenta de que él tampoco tenía idea alguna de cuándo sucedería eso que quería

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Raised by the Mountains || Lo'ak SullyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora