Una Cacería Más || Valastor short take

Discharge

⚠️Advertencia ⚠️
Este capítulo contiene Gore, sangre y contenido sensible

Las horas se le pasaron como minutos en lo que esperaba la cita del supuesto encuentro, tomaba un café caliente en una de las mesas exteriores de la cafetería.

Se había pasado ya el efecto de los medicamentos y comenzaba a tener frío. Sus dedos comenzaron a tornarse negros, gracias a el choque de sentimientos de las últimas horas, eso era bueno y malo. Bueno porque tendría un poco más de fuerza y malo porque sí no canalizaba sus emociones podría salir de control, más de lo que ya saldría.

Se tuvo que colocar sus guantes, junto con su abrigo color vino, estaba más que cómodo, pero era hora de marcharse, dejó más de la cuenta y se retiró.

En un abrir y cerrar de ojos sin que nadie se diera cuenta, solo se veía una sombra idéntica a él yendo rápido por la carretera hasta llegar a una gasolinera, cinco minutos antes, puntual como siempre.

El auto del mayor se estacionó metros atrás aún recibiendo la luz de la estación, el alto hombre salió del auto, llevaba una chamarra negra y jeans.

Nunca distinguió a su "amado" rehén, pudo hacerlo cuando ya estaba demasiado cerca, viendo que caminaba tranquilamente hacia él. Notando como su sonrisa incrementaba en tamaño tornándose amarilla brillante de la cual emitía una interferencia radial. El más alto se quedó estático y de un segundo a otro tenía al castaño junto a él tomándolo del cuello.

-Es bueno que vinieras mi amigo -su voz tenía un claro efecto de radio con interferencia- la diversión ya va a empezar -se rio y lo aventó a la acera- llévenlo dentro -dijo sin mostrar emociones y sus sombras lo adentraron en el bosque, siguiéndolos hasta llegar con el

-Alguien recuperó su memoria -sonrió- que mal, me encantaba verte sumiso ante mí y sí te sometí una vez y lo haré de nuevo -se levantó del pasto

-¿Enserio? Demuéstramelo -abrió los brazos, el pelinegro intentó taclearlo, pero antes de siquiera tocarlo sus amigos lo frenaron tomándolo de los pies haciendo que cayera frente a él, causándole risas- creo que esto es trampa, ¿Qué te parece si nivelamos esto un poco, he? -miró a sus sombras- ya no intervengan, prometo que estaré bien -se miraron entre sí y solo asintieron dispersándose

-Se levantó de nuevo-- sin ellos no eres nada -se sacudió y lo sorprendió atacándolo con un cuchillo, haciéndole una cortada en brazo izquierdo, gracias a que el castaño se movió no fue profunda

-Puede que tengas razón en ello -ríe un poco- pero al final.. -mira su mano con sangre- muchas personas al escuchar mi nombre huyen aterrados -sus ojos rojos brillaban en locura al recordar a los pobres condenados que llegaron a meterse con él

Con su mano izquierda lanza un zarpazo al mayor que cubre con el mismo brazo que tenía el cuchillo, quejándose por la herida y arremetiendo con el mismo logrando clavar el cuchillo en el cuello del otro haciéndolo toser sangre.

-Ha! -toce- eso quería lograr! -sostenía su cuello- ¿Qué se siente todo esto? -sonrió maniático- ¿El estar tan ansioso? ¿No poder acabar con tu puta presa? -lo abofeteo logrando cortarle con sus largas garras rojas para luego tomarlo por el cuello de su chaqueta- la humillación que tendrás después de esto -lo tiró lejos, respiraba fuerte gracias a la reciente cortada que recibió- que todos sepan que eres un inútil, un ingenuo que caerá en toda trampa que le pongas enfrente, un maldito desperdicio de persona que no sirve más que para dar lastima -tosía entre risas

-Cállate! -era demasiado fácil de manipular, se levantó dando un ataque impulsivo por lo que el castaño pudo quitarle el cuchillo sin problema, atravesando su dorsal derecha jalando la hoja del metal hacia el lado casi partiendo su mano en dos- agh! Hijo de puta!

Se encogió apretando la reciente cortada adolorido, aprovechando el más bajo para patear su cabeza empujándolo hacia atrás, el fornido ya estaba más que furioso.

Corrigió su postura y se abalanzó al sonriente hombre soltando un fuerte puñetazo que paro en un árbol, gracias a que el otro lo esquivó, lanzó otro a su estómago que también pudo evitar, pero no uno que le dio en la quijada volteándole la cara, dándole la oportunidad de atacar su estómago nuevamente provocándole toser más sangre.

Harto, el castaño arremetió con un movimiento en gancho al abdomen del otro, clavado sus garras apuñalando con sus cinco dedos hasta donde pudiera llegar, haciéndolo retroceder del dolor.

-Quería demostrarte que podía contigo a pesar de tus putos trucos, pero ya me harté -sacó una pistola de su chamarra y disparó dándole tres disparos en su torso, haciéndolo caer de rodillas, le estaba costando regenerar todas esas heridas

Apoyó una mano en el piso y con la otra se sostenía uno de los agujeros, respiraba de manera bastante audible, gruñendo un poco porque se sentía estúpido estando de esa manera con un ser tan miserable como el que se encontraba enfrente de él.

Ya tenía más que suficiente igualmente, comenzó a deformar su cuerpo en aquel venado antropomórfico rojo, abalanzándose contra el de un salto y tirándolo sobre el pasto mojado. Solo bastó de un golpe en el medio de su pecho para romper la conexión de algunas de sus costillas, provocando un fuerte grito en el pelinegro, cosa que hizo que la sonrisa del venado se extendiera anormalmente.

-Tú también ya me estabas cansando -decía entre risas- pero ahora creo que me estoy divirtiendo -rompió la playera del de ojos grises dejando expuesta su piel a la lluvia

-¿Divirtiendo? ¿Piensas matarme puto monstruo de mierda? -apenas podía decir, comenzaba a entrar en shock por el inmenso ser que tenía encima, no había visto algo parecido en su vida y todo se empezaba a tornar negro a su alrededor solo enfocándose en él- ¡TODOS van a saber que fuiste tú después que me encuentren! Al fin te irás hoyo -buscaba la forma de cómo salir del agarre del venado, pero era prácticamente imposible ahora que ya no tenía su arma cerca

-Sí tomo tu vida, talvez me puedas decir que se siente respirar cuando estás muerto -ríe- te vieron perder la cabeza y no saben lo que hiciste conmigo, sí les dijeras que fui yo, no te creerían porque no tendría ninguna razón de hacerte todo esto, "te perdone", además ellos no me conocen de esta manera -posa erguido señalándose- no habrá una lápida con tu nombre -peina su pelaje hacia atrás- creo que es más divertido que tu victima experimente una sensación tan atroz que anhele estar muerta

-Monstruo enfermo.. -trato de soltarle un golpe, pero el de astas tomó su brazo con una mano y con la otra se apoyó en su pecho, provocando quejidos casi inaudibles gracias a la falta de aire por la presión que le otorgaba

-Mira quién lo dice -se acerca a el- debiste tenerlo en cuenta antes de herirme en la forma en que lo hiciste -despegó su mano dejándolo respirar con menos dificultad

Se alejó un poco para tener más movilidad y con un enfermo cuidado de no atravesar más que la epidermis, comenzó a rasgar su cuerpo con sus garras. Y obviamente el otro no se iba a quedar solo viendo, así que tomó una de sus astas distrayéndolo lo suficiente para poder forcejear. Peleaba con el dolor en su torso y también con el demonio que tenía encima tratando de librarse.

El venado aúnconservando el cuchillo lo clavó en la mano izquierda del otro contra latierra, aprovechando que la atención se concentró en esa mano, tomó su brazocontrario y de otro golpe rompió su articulación. Los gritos del pelinegroapenas se escuchaban hasta la gasolinera, que, para mala suerte del hombre, eldueño dormía en su silla.